El objetivo de este plan de pagos, que cerró ayer las posibilidades para anotarse, apuntó a que las empresas avancen en su programa de saneamiento financiero con pagos de deudas de entre 12 y 24 cuotas. Se permitió que las firmas entren con pasivos  corrientes posteriores al 31 de mayo de 2016. El plan de pagos se planteó para cancelar las obligaciones impositivas, de los recursos de la seguridad social, retenciones y percepciones, así como de sus respectivos intereses  

La AFIP había decidió prorrogar hasta el jueves 30 de noviembre inclusive, el Puente Fiscal que vencía originalmente el 31 de octubre. El plan de pagos sirve para cancelar las obligaciones impositivas, de los recursos de la seguridad social, retenciones y percepciones, así como de sus respectivos intereses.

La entidad recaudadora a cargo de Alberto Abad indicó que la medida apuntó a facilitar la adhesión de quienes generaron deudas impositivas y aún no habían podido regularizar su situación. De esta forma la AFIP se hace eco de la solicitud de distintos sectores que quieren cumplir con sus obligaciones fiscales.

Entre los conceptos alcanzados para regularizar, se destacaron las obligaciones tributarias y de los recursos de la seguridad social vencidas entre el 1º de junio de 2016 y el 31 de mayo de 2017, inclusive. También se subrayó que fueron aceptados para su regularización las deudas anteriores incluidas en planes anulados, caducos o rechazados por la entidad recaudadora. Desde el organismo tributario aseguraron que el objetivo es ampliar la base imponible y no elevar los impuestos. La regularización de las deudas tributarias es una forma para avanzar en esta dirección, al tiempo que se apunta a la formalización del conjunto de la economía.