Tras el ataque de las palometas y la reciente aparición de miles de peces muertos en la zona, otra polémica se sumó al flamante balneario El Paranacito: la posible contaminación de sus aguas las cuales no serían aptas para bañarse ni para realizar actividades recreativas.  

 

De acuerdo a un estudio realizado en noviembre del año pasado por la Administración Provincial del Agua (APA), que lleva la firma del ingeniero Hugo Rorhman, las aguas del riacho Arazá, Tala, el Paranacito y el balneario, tienen altos niveles de contaminación, originadas principalmente por materia fecal. Del análisis surgió que el lugar menos contaminado está excedido en nueve veces los valores límites para uso recreativo.   

 

El informe, al que tuvo acceso CHACO DIA POR DIA, tiene fecha del 5 de Diciembre de 2016 y está dirigido al Secretario Técnico de la APA, Omar Navarro.

 

El mismo señala que ante al requerimiento de vecinos y usuarios del balneario del riacho Paranacito en la jurisdicción de Puerto Vilelas y por el propio municipio, en cuanto al reclamo por la mala calidad del agua de ese sistema hídrico se informa que el “funcionamiento hídrico actual indica que el escurrimiento que sale del canal Soberanía Nacional por la obra de control en Puerto Vilelas y del riacho Arazá con agua de su cuenca de aporte y el Canal 16, descargan hacia el río Paraná o hacia un pequeño arroyo, Tala, que finalmente conecta con el riacho Paranacito según los niveles de agua y los caudales que cada uno tiene, contaminando sus aguas y por lo tanto generando situaciones no adecuadas para el uso recreativo de dicho balneario”.

 

En este sentido, sostuvo que se acordó con el Laboratorio de la APA realizar tomas y análisis de muestras. Los mismos indicaron que de “los análisis bacteriológicos muestran la elevada presencia de coliformes totales, con valores mayores a 540.000 NMP/100 ml en puente Arazá (a 500 m de la estatua del Pescador), 54.000 NMP/100 ml en puente camino a paraje San Antonio y 4.500 NMP/100 ml en el balneario. Algo similar ocurre con los coliformestermotolerantes”.

 

Como conclusión, Rorhman afirmó que de acuerdo a los estudios las “aguas están claramente contaminadas con materia fecal y excedidas totalmente del valor límite para usos recreativos de 500 NMP/100 ml, aguas provenientes actualmente tanto del riacho Arazá y el canal Soberanía Nacional, y del río Paraná aguas abajo de la descarga del riacho Barranqueras, donde SAMEEP vuelca sin tratar líquidos cloacales de lo que se denomina cloaca máxima del AMGR”.

 

En base a esto y con el objetivo de mejorar la calidad del agua del balneario Paranacito, se propuso cerrar la conexión entre el riacho Arazá y el arroyo Tala, “para que los excedentes contaminados del riacho Arazá - canal Soberanía Nacional descarguen en el río Paraná, y que a su vez el escurrimiento contaminado del río Paraná no entre hacia el sistema Tala – Paranacito”.

 

“La descarga directa hacia el río Paraná tiene a su vez la consideración la mayor capacidad autodepuradora del río Paraná, con lo cual se mejorará sustancialmente la calidad del agua y cumplir con los límites máximos para su uso como balneario”, explicó.

 

“Cabe señalar que el cierre propuesto debe servir para situaciones de aguas bajas o medias del río Paraná, hecho que ocurre en el 93 % del tiempo, debería ser de poca altura y cubrir el ancho del cauce del arroyo Tala. En el caso de crecidas del río Paraná, el agua pasará por arriba, y habrá que ver de reconstituirlo cada vez que esta situación ocurre. Una medida similar se ejecutó con el visto bueno de APA en la zona de paraje Soto y Tacuaní, ante una entrada de agua directa del río Paraná hacia esa zona en épocas de aguas bajas, afectando la comunicación entre esos parajes”, añadió.

 

“Una solución a mediano y largo plazo es mejorar la calidad de agua que descarga el canal Soberanía Nacional, impensable actualmente dado las características de funcionamiento de ese sistema hídrico, con efluentes cloacales, domiciliarios y de industrias y comercios de su área de aporte”, indicó.

 

“La Dirección de Obras realizó una inspección al sitio elegido para el cierre, junto a la Ing. Mónaco asesora técnica del Municipio de Puerto Vilelas, y posteriormente ejecutó una batimetría que permitió cuantificar el cómputo métrico de tal cierre Nº 1, en coincidencia con el camino y puente sobre el arroyo Tala. (Ver imágenes adjuntas). Se necesitan 364 m3 de terraplén y un costo estimado total de $ 135.648, para lograr el objetivo de que no ingrese agua contaminada al balneario Paranacito”, sostuvo el informe.

 

En este sentido, recogió una nota periodística en donde se informaba sobre la creación del balneario, el cual finalmente se inauguró a fines de enero. “Esto significa que si no se ejecuta el cierre del agua contaminada en el comienzo del arroyo Tala (cierre 2), esta inversión no tendrá un objetivo asegurado ya que las aguas estarán contaminadas y no podrá usarse como balneario”, señalaba el documento.

 

 

“Entonces es lógico solicitar al Ministerio de Infraestructura para que destine $ 136 mil para hacer el cierre propuesto, por fondos propios o a través del organismo que corresponda, y así asegurar el objetivo perseguido en el Convenio”, indicó.