A pesar de ser anunciada hace unos dos años y registrarse un par de inconvenientes en lo que respecta a la ubicación de la futura planta de tratamiento de líquidos cloacales para la ciudad, desde el Gobierno de la Provincia explicaron que actualmente se encuentran cumpliendo los trámites administrativos y ambientales antes de avanzar con las obras. Autoridades del Ente Regulador del Agua explicaron que se encuentran analizando la disposición de las dos estaciones de bombeo requeridas para el funcionamiento de la estructura que estará ubicada en la zona de Santa Catalina, así como también presentaron las documentaciones que son requeridas a nivel nacional para los trabajos.

Para la construcción de la planta de tratamiento de líquidos cloacales se invertirán unos $1.200 millones financiados a través del Banco Interamericano de Desarrollo (BID). Sin embargo, en los últimos años el proyecto de obras tuvo demoras debido a que contemplaba estructuras en la traza donde se planifica la construcción del segundo puente interprovincial Chaco-Corrientes, que también estará ubicado en los terrenos de Santa Catalina, al sur de la ciudad.

En diálogo con Radio Dos, el interventor del Ente Regulador del Agua de Corrientes, Arturo Vásquez, explicó que a dos años del anuncio oficial de la construcción de la planta de tratamiento de efluentes cloacales, actualmente se encuentran cumpliendo diversos pasos administrativos referentes a cuestiones de preservación ambiental, que son previos a las obras. “Hay algunos ajustes presupuestarios y algunos papeles legales de la obra, sobre todo estas que tienen que ver con la conservación del ambiente. Tiene que ver con la cantidad de residuos que se tira desde Corrientes hacia el río, y una cuestión de conservación de nuestro patrimonio”, manifestó el funcionario provincial.

Dentro de las planificaciones que se encuentran realizando, la Provincia evalúa las estaciones de bombeo de los efluentes cloacales que transportarán el agua a la planta ubicada en Santa Catalina. “En este tipo de obras lo que más tarda son las cuestiones ambientales más que la obra en sí, sobre todo porque se va a intervenir en varios barrios donde se van a hacer estaciones de bombeo”, explicó Vásquez.

El proyecto de la planta de tratamiento de líquidos cloacales contempla dos estaciones de bombeo, una será llamada “Cementerio”, que estará ubicada en las inmediaciones del camposanto San Juan Bautista, que tendrá un caudal de mil litros por segundo, y la otra será “Ñapindá”, que estará al sur de la ciudad, con un volumen de 1.600 litros por segundo. Las estaciones serán las encargadas de impulsar los líquidos cloacales hacia Santa Catalina. Cada estructura nueva contará con sus tuberías de impulsión y caños colectores a lo largo de los recorridos que deberán realizar a través de la ciudad hasta la estructura situada al sur.