Ante las últimas lluvias que viene soportando esta localidad y los problemas que generan en la zona rural y urbana, la Comuna decidió declarar la emergencia hídrica y junto a técnicos de la Provincia trabaja en  un proyecto para realizar canalizaciones que permitan proteger al pueblo de los excesos hídricos.

Así lo confirmó a PUNTAL la jefa comunal, Milena Rosso, quien ayer  recorrió la localidad junto al ingeniero Horacio Genesio, de Recursos Hídricos de la Provincia, para evaluar la situación y determinar un plan de obras urgentes.

“Hemos decidido declarar la emergencia hídrica, que significa que pase lo que pase, en adelante la Provincia se hace cargo de lo que se deba hacer”, precisó. Adelantó también que para la semana que viene esperan la presencia de un ingeniero civil para hacer mediciones de terrenos y comenzar a proyectar algunos desagües que permitan evacuar los excesos hídricos sin comprometer a la población.

“Una vez que estén los proyectos se presentan en Recursos Hídricos y en unos 10 a 15 días  estarían mandando las máquinas para hacer las obras”, dijo Rosso.

La jefa comunal explicó que Suco está en una zona baja y que a ello se suman algunas acciones del hombre que van desviando los excesos y comprometen la evacuación. “Nosotros tenemos la vía de ferrocarril que sirve de contención del agua para que no llegue al pueblo. Días atrás, cuando cayeron unos 60 milímetros solamente, el agua quedó a nivel y no pasó para el pueblo, pero ayer (lunes), con los más de  100 milímetros, desbordó. A pesar de tener los desagües limpios y ordenados, esta cantidad de agua superó todas las previsiones”.

Aunque aclaró Rosso que no hubo problemas en viviendas, se teme que de ocurrir un fenómeno de las mismas características puedan verse comprometidas algunas casas.

De acuerdo con lo previsto, lo que se buscará hacer en lo inmediato es una canalización para que las aguas escurran por zonas rurales.

“Hace 12 años  que estoy acá y nunca pasó esto. Y no es la primera vez que llueve. Estamos preocupados porque cada vez las tormentas son con mayor cantidad de agua y más seguidas”. Destacó Milena Rosso la preocupación de funcionarios del Gobierno provincial, quienes inmediatamente conocida la situación se pusieron en contacto para brindar todo tipo de ayuda y asesoramiento.

Recordó la jefa comunal que junto a Chaján, Sampacho y Bulnes vienen trabajando desde hace tiempo para hacer un consorcio canalero, debido a que cuando hay desbordes en la cuenca Suco, el agua por pendiente va hacia las poblaciones antes mencionadas. “El ingeniero Genesio me dijo que es cuestión ponernos de acuerdo entre los pueblos y trabajar para poder prevenir esto lo que nos está pasando”, sostuvo.

Moldes, acechada por el

agua de cuencas arriba

Otra ciudad que  el lunes se vio seriamente comprometida por el agua fue Coronel Moldes. En la localidad se registraron unos 85 milímetros, pero a esta masa hídrica se sumó la que bajó de la zona de Chaján y que reventó el albardón construido tiempo atrás alrededor de la población.

Según explicó Jorge Costanzo a PUNTAL, la fuerza del agua rompió la defensa en la zona del Aero Club, y anegó varias calles, llegando a ingresar a sectores donde históricamente nunca hubo problemas de inundación.

“Lo que pasa es que Coronel Moldes tiene un grave problema de ubicación. Está en un cuello de botella y todo lo que llueve en la parte sur de Chaján desemboca en nuestra ciudad. Se suma además el agua de la laguna Suco, y el lunes vino un volumen de agua impresionante que no hubo forma de pararla”, detalló el intendente.

Costanzo dijo que los daños mayores fueron en calles de tierra, que quedaron totalmente destruidas. “Estamos trabajando para ver si podemos recuperar algo en estos días hábiles que quedan de la semana”, precisó. Además, dijo que sólo en unas pocas viviendas hubo ingreso de agua y problemas por eclosión de un tapón de cloacas en un hogar.  

El mandatario detalló que en primer lugar se trabajará para reforzar el albardón que se vio afectado por los excesos hídricos, al tiempo que admitió que urge conformar un consorcio de conservación de suelos de manera tal que en los campos se retenga agua y que no baje de golpe hacia la ciudad. Y aclaró que más allá de que en la ciudad se refuerce y se eleve el albardón, ante el agua que baja de Suco y Chaján, por pendiente natural, es inevitable que los excesos pasen por Moldes.

Costanzo también dijo que es permanente el control de las napas freáticas que años atrás comprometieron a la ciudad. “Semanalmente hacemos mediciones, y hemos notado que se han elevado, pero están controladas”, precisó. “Estamos en contacto con Recursos Hídricos en forma permanente por si es necesario colocar bombas para deprimir la napa”.