El PJ arrima a rivales históricos en la CGT

El PJ arrima a rivales históricos en la CGT

En silencio, la CGT encaró una tregua interna que promete pavimentar un nuevo intento de reunificación de sus rivales más históricos. En el lapso de diez días y bajo el paraguas del PJ, Hugo Moyano y Héctor Daer, los más emblemáticos representantes de las corrientes “dialoguista” y “combativa” de la central, respectivamente, habrán tenido encuentros junto a otros dirigentes de peso orientados a explorar la chance de una protesta consensuada, como anticipó ayer Ámbito Financiero.

 

Este jueves fue la segunda vez que el referente de los “gordos” de los grandes gremios de servicios y el camionero se vieron las caras en un encuentro partidario, el mismo ámbito que también había motivado un encuentro previo el jueves pasado. Mientras que el lunes que viene se dará la tercera juntada en esa ocasión con la excusa de la presentación de los números de la inflación medidos por la Universidad Metropolitana para la Educación y el Trabajo (UMET).

En el entorno de los dirigentes coincidieron en descartar que se tratara de meras casualidades. En la interna de la central sindical cobra relevancia una nueva foto de Daer y Moyano como la del Congreso del PJ en el microestadio de Ferro. Aunque nadie prevé que la eventual tregua entre “integrados” y “apocalípticos” vaya a alumbrar una reestructuración de la CGT para este año, en ambas orillas advirtieron que en 2020 vencerá el mandato del actual Consejo Directivo y permanece la incógnita acerca de la sucesión de los actuales secretarios generales, Héctor Daer y Carlos Acuña.

Por lo pronto, en el horizonte más inmediato la conducción formal de la CGT y la oposición que rodea a Moyano negocian afrontar en conjunto la conflictividad hasta las elecciones de octubre. Ayer la jefatura de la central acordó con empresarios pyme y del rubro industrial realizar una marcha durante la primera semana de abril para protestar por la falta de una política oficial de aliento y promoción al sector, y “en defensa de la producción y el trabajo”, tal como adelantó este diario.

En paralelo, el Frente Sindical por el Modelo Nacional y la Multisectorial 21-F, espacios que auspicia el camionero con la participación de los mecánicos del Smata, la Corriente Federal de Trabajadores y las dos versiones de la CTA, alista una marcha federal evocativa de las que en 1994 golpearon la administración de Carlos Menem.

En Ferro se encontraron y se fotografiaron, además de Daer y Moyano, el mecánico Ricardo Pignanelli, el canillita Omar Plaíni (la avanzada diplomática del camionero y con cargo en el PJ bonaerense), el jefe de la CTA de los Trabajadores, Hugo Yasky y el dirigente de La Cámpora Andrés “Cuervo” Larroque. También había concurrido el líder de los metalúrgicos (UOM), Antonio Caló. El lunes en la UMET se les sumará el encargado de edificios Víctor Santa María (anfitrión, Suterh) y Pablo Moyano, entre otros.

La –todavía prematura- chance de un entendimiento entre Moyano y los “gordos” amenaza la alianza más duradera de los últimos años dentro de la CGT alcanzada entre ese sector mayoritario y el de los “independientes” de buen diálogo con el Ejecutivo como Gerardo Martínez (albañiles, Uocra), José Luis Lingeri (Obras Sanitarias) y Andrés Rodríguez (estatales, UPCN), más distantes del PJ que orbita alrededor de Cristina de Kirchner y más cercanos tanto a Miguel Pichetto como a Mauricio Macri. También molestará a Luis Barrionuevo, la tercera pata de sostén de la actual conducción de la CGT y volcado hacia el economista Roberto Lavagna para las próximas elecciones.

Comentá la nota