Back to The Future: Vidal ya se prueba el traje de presidenciable para 2023

Back to The Future: Vidal ya se prueba el traje de presidenciable para 2023

Con números irreversibles, al menos en territorio bonaerense, el aparato político del oficialismo encara el tramo final de la campaña intentando retener la mayor cuota de poder territorial a través de los municipios y, por supuesto, con un nutrido grupo de legisladores en ambas cámaras de la Legislatura, con el objetivo de consolidarse rápidamente como la opción de contrapeso al peronismo unido.

 

 

El lugar reservado para la gobernadora María Eugenia Vidal es, como ya dijimos varias veces en este espacio, el de lideresa de la oposición en una carrera en la que muy probablemente ya deba competir con el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, y el gobernador mendocino, Alfredo Cornejo, uno de los puntales de Cambiemos, hoy alejado de Mauricio Macri.

Para eso, es evidente que el equipo de campaña trabaja a destajo en las últimas horas para que la mandataria, a pesar de la derrota, le transmita a sus votantes y al resto de los bonaerenses una imagen de su mejor versión, sin ánimos de confrontación y plantándose como uno de los dirigentes con potencialidad de superar la "grieta" y abrir el juego de cara al futuro.

Sin hablar de una eventual derrota de manera directa, en la última semana Vidal reiteró en varias oportunidades que "a pesar de los resultados" va a seguir peleando por la Provincia, lo que adelanta que su ámbito de acción seguirá siendo el bonaerense, y fuerza un poco más la distancia con el Presidente, a pesar de respetar el protocolo de actos conjuntos de campaña.

En el equipo de gobierno más de uno ya ni siquiera se acerca a los despachos y los más optimistas tienden puentes con los intendentes de los distritos "ganables" y con los candidatos a legisladores para buscar refugio después de la derrota, porque entienden además que la Ciudad Autónoma de Buenos Aires no será un destino posible o al menos será complicado porque deberán disputar los lugares con parte del equipo que actualmente se desempeña en Nación.

Se podría decir que, a pesar de lo que se manifiesta hacia afuera, el equipo de Vidal está en pleno proceso de retirada y quiere hacerlo dejando, por lo menos en los papeles, cada organismo de la forma más ordenada posible, porque justamente esa será la plataforma de lanzamiento del espacio de oposición que comenzarán a proyectar a partir del 10 de diciembre.

Macrismo sin Macri… ¿y sin Carrió?

Parte de la trampa en la que se encuentra Vidal tiene que ver con las nulas aspiraciones del Presidente de continuar su actividad política desde un rol opositor desde el llano, lo que lleva a todo su equipo a jugar a todo o nada sin medir los costos que eso pueda tener en el territorio.

Con esa lógica, Elisa Carrió disparó munición gruesa contra importantes jefes comunales del oficialismo que promueven el corte de boleta y los acusó de “traidores”, de la misma manera que llamó “acomodaticios” a los funcionarios que ya están negociando su destino después de la derrota.

El problema es que los dichos de la diputada llegaron apenas unos días después de que Vidal “bancara” el corte de boleta, al advertir que si los jefes comunales habían realizado un buen trabajo es lógico que quieran discutir su gestión, es decir, municipalizar la campaña.

Claro que Vidal se sabe afuera de la Casa de Gobierno a partir de diciembre y por eso hoy apunta más a favorecer a que los intendentes retengan el poder que a potenciar su propia reelección, que parece una tarea no difícil, sino imposible.

Por eso, si los resultados son los que se esperan el próximo 27, el Presidente se irá a escribir sus memorias a Europa como prometió, pero Carrió sería eyectada del espacio residual del oficialismo por las huestes de la Provincia, donde sus dichos causaron un verdadero revuelo a solo una semana de las elecciones.

Comentá la nota