Las bases para un nuevo contrato social

Las bases para un nuevo contrato social

La crisis económica pone de manifiesto la necesidad de generar consensos para paliar la situación. Los aportes y demandas de los sectores para poder concretar un pacto social en un futuro Gobierno.

La Argentina está sumida en una profunda crisis económica que golpea con dureza en el plano social. Luego de las primarias de agosto, el escenario político tomó un rumbo que, inexorablemente, apunta a la posibilidad de que Alberto Fernández sea el próximo Presidente, a partir del 10 de diciembre.

La Tecla tomó contactó con los representantes de los espacios que tendrán protagonismo en un futuro “contrato social”. Movimientos sociales, empresarios, sindicatos y políticos fueron consultados sobre la conveniencia de buscar una salida en conjunto a la crisis y los aportes de cada sector.

Tras el categórico triunfo en las PASO, el candidato del Frente de Todos comenzó a reunirse con representantes de los distintos sectores de la vida económica, política y social argentina. El objetivo es empezar a establecer los primeros lineamientos de una futura concertación para afrontar los embates de la crisis durante los primeros meses de su gestión.

Tanto el exjefe de Gabinete kirchnerista como su compañera de fórmula, Cristina Fernández de Kirchner, expusieron públicamente la necesidad de generar acuerdos “con derechos, pero también con obligaciones”. Este nuevo pacto, según dejó entrever Fernández, tendría entre las primeras medidas generar un compromiso para, en los primeros 180 días de su eventual mandato, poder “recomponer salarios sin que esto signifique aumento de inflación”.

En el mismo sentido, la expresidenta, durante la presentación en Misiones de su libro, Sinceramente, expresó que “Argentina necesita un nuevo contrato social de ciudadanía responsable de todos y todas para salir de la crisis”.

Hace dos semanas, y con motivo del 50° aniversario de la Unión Industrial Tucu-mana (UIT), el candidato opositor se mostró junto a dos de los principales actores que tendrán mucha relevancia en los próximos meses: Miguel Acevedo, de Unión Industrial Argentina (UIA), y Héctor Daer (CGT).

Pero, pese a la gravedad de la coyuntura económica y social, no todo apunta a la concreción de armoniosos entendimientos. Uno de los vicepresidentes de la UIA, Daniel Funes de Rioja, reclamó que se dicte la “emergencia laboral”. El dirigente empresarial dijo: “Tenemos que generar un contrato de emergencia laboral para que las pymes puedan contratar sin pagar cargas sociales por dos a tres años, sin indemnizaciones y reforzando el seguro de desempleo”.

En diálogo con La Tecla, Hugo Godoy, secretario general de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), salió al cruce de las declaraciones del empresario sobre las reformas estructurales y re-marcó que “lo que dice Funes de Rioja es una provocación”. Además denunció que el industrial descalificó la posibilidad de acuerdos al hablar de un “pactito” que puede durar hasta un próximo “Rodrigazo” si no se cumplen las reformas estructurales que ellos demandan.

Otro de los consultados fue el diputado nacional Daniel Arroyo, presidente de Bloque Red x Argentina. El exministro de Desarrollo Social de la Provincia sostuvo que “hay que hacer un contrato social, un pacto social en la Argentina. El mismo tiene que tener tres puntos claves”.

“Primero, la defensa del trabajo, cuidarlo. Hay un problema serio en la Argentina de caída del formal y de parate del sector in-formal de la economía. Un segundo punto tiene que ver con los costos de los alimentos. El comer tiene que ser barato en Argentina”, afirmó. Y como tercer ítem apuntó: “Hay que reconstruir la movilidad social ascendente sobre la base de educación y trabajo. Hoy hay movilidad social pero descendente”.

El exviceministro de Desarrollo Social de la Nación fue lapidario a la hora de describir la situación actual, a la que calificó como “una catástrofe social”. También hizo referencia a los intereses en pugna y manifestó que “estructuralmente hay miradas distintas e intereses encontrados, pero hoy, el problema es estructural”.

Desde el espacio que comanda el candidato presidencial del Frente de Todos se mostraron optimistas con la posibilidad de arribar a buen puerto en una concertación multisectorial. Al respecto, Nicolás Trotta, coordinador de los equipos técnicos de Alberto Fernández, remarcó la importancia de dialogar con los distintos sectores de la producción, como los empresarios, los trabajadores, las organizaciones sociales, y “después tener una mirada lo más cercana posible a la realidad” del país.

Asimismo añadió que en ese “pacto social” que plantea Alberto Fernández, “lo importante es intentar saber que quienes tienen que poner el hombro son los que tienen la espalda más ancha”.

Hoy, el espanto ante la crítica situación que atraviesa el país puede ayudar a la final concreción del acuerdo. En el Frente de Todos confían en la posibilidad de un fuerte acompañamiento de la industria, del comercio e incluso del sector agropecuario. “Todos están sufriendo la consecuencia de una economía estancada y la caída del consumo”, agregó Trotta.

Por último, Daniel Arroyo dijo: “El país necesita capacidad de gestión y generar políticas públicas”; y destacó que “Alberto es una persona que combina diálogo, capacidad de gestión y la apertura necesaria”.

Un tapado para el ministerio de Desarrollo Social

Según pudo saber La Tecla, Alberto Fernández piensa en hombres de su extrema confianza para sectores claves. En ese sentido, el Ministerio de Desarrollo Social figura como un área sensible, y en carpeta está alguien que no aparece en las fotos pero corta el bacalao. Así comentaron desde el entorno del candidato de Frente de Todos. Se trata de Hernán Torres Guerrero, dirigente que trabaja a la par de Fernández y con quien fundó el partido Parte, en 2009. Claro está, el hombre en cuestión sería un alfil del diputado nacional Daniel Arroyo, en su eventual rol ministerial. Además, un escalón más abajo aparecen Fernando "Chino" Navarro y Emilio Pérsico, dirigentes del Movimiento Evita.

La Iglesia aporta lo suyo en busca de una solución

La Iglesia se hizo eco del grave momento que atraviesa el país e hizo un llamado a “nuevo pacto social”. El marco fue la convocatoria a la XXII Jornada de Pastoral Social, de la cual participaron dirigentes del oficialismo y la oposición; sectores del campo; sindicatos -entre ellos, la CGT-; referentes empresarios y movimientos sociales. “Un pacto social lo imagino como una gran mesa de la comunidad nacional, donde están todos los sectores, donde todo el mundo llevará verdades en su corazón y en su mente”, propuso el cardenal Mario Poli, arzobispo de Buenos Aires. 

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