La Ley 14.802, aprobada por La Legislatura provincial, significó “un avasallamiento sobre las incumbencias médicas y habilitó a otros integrantes del equipo de salud a realizar acciones sanitarias para las que no están preparados y formados, porque son de exclusividad de los galenos”, y señaló que la determinación “se amparó en la creencia de que la mujer es solo un aparato genital”.

“Es incomprensible la lógica que llevó a los legisladores a aprobar una norma contraria a la salud de la población”, afirmó.

El dirigente subrayó que la ley permite ahora a las obstetras -y “es muy grave”- decidir y aplicar medidas de emergencia, de ser necesario, hasta que “se presente el especialista, lo que constituye una situación extrema que solo serí­a comprensible en un lugar sin acceso a los médicos o a los centros asistenciales”.

“No es el caso de la provincia de Buenos Aires. Es una decisión irracional y riesgosa para la salud, en especial si se tiene en cuenta la cantidad de médicos matriculados y de establecimientos que existen en territorio bonaerense”, puntualizó Garín.

El Colegio de Obstétricas aseguró por su parte que la norma “no hizo más que poner en la letra lo que ya se hacía”, y aceptó que hasta la sanción de esa iniciativa el sector realizaba “un ejercicio ilegal de la medicina”, según expresó hoy Garín.

La organización sindical, por lo tanto, denunció ante las autoridades y la población en general “el peligro que supone que procedimientos estrictamente médicos sean asumidos por integrantes del equipo de salud que no están capacitados” para la tarea.

El sindicalista, quien representa a los médicos del sector privado de todo el país, concluyó que “la salud del pueblo está en juego”.