La sede central de la Sociedad Hebraica Argentina no se vende. Al menos por ahora. La Inspección General de Justicia (IGJ) decidió suspender la asamblea del 29 de abril que se iba a realizar en Pilar. Allí, la intención era aprobar que el edificio histórico de Once se vendiera al gremio de los porteros (SUTERH), que conduce Víctor Santa María. Ahora, las autoridades debieron dar un paso atrás y postergaron la discusión para octubre, cuando haya elecciones generales.

La oferta era por más de 11 millones de dólares para obtener por completo (ya tiene 5 pisos adquiridos) la sede de la calle Sarmiento para construir una universidad. Sin embargo, un grupo de socios se presentó ante la IGJ y el organismo les dio la razón, observando varias irregularidades en el proceso. 

"Querían hacer la asamblea en Pilar, cuando la sede legal es en Once, no había número certero de socios, la Justicia nos dio la razón", relató Samuel Muzykanski, extesorero de Hebraica.

Tras la decisión judicial, las autoridades que encabeza el presidente Diego Dinitz, adelantaron que el tema se debatirá en octubre cuando haya elecciones generales que definirán a los nuevos conductores de la institución. 

Muzikanski agregó a Perfil: "Les dejamos en claro que no tiene nada que ver el rol de Santa María. Esto hace a la historia de la institución, las cosas se tienen que hacer bien". Este medio intentó hablar con Dinitz y el sindicalista de los porteros, pero no hubo respuesta.