A dos años que dos vecinas denunciaran el no funcionamiento de las cloacas en el barrio Butaló, la punta del ovillo que develó el escándalo de la obra mal realizada por la empresa Jubete, la concejala Claudia Giorgis pidió que la Municipalidad no contrate más a esa empresa, además de calcular que los gastos generados y el daño causado a los vecinos ronda los 50 millones de pesos.

En un comunicado, la concejala recordó que se cumplen este 9 de julio dos años “de aquella tapa de El Diario con las dos vecinas que reclamaban por el no funcionamiento de sus cloacas”.

“Efectivamente aquella mañana del bicentenario nos estábamos preparando para ir a esa celebración cuando vemos la tapa del diario el Diario con estas dos vecinas que habían acudido a la prensa cansadas de lidiar con una difícil situación sin obtener respuestas y habiendo llamado a plomeros, cloaquistas particulares y a la Municipalidad en reiteradas oportunidades”, señala. “Venían sufriendo desde hacía bastante tiempo que sus cloacas no funcionaban, llegando a esta situación límite inclusive manifestando problemas en sus ojos y otros inconvenientes de salud”, recuerda.

 

“Fue entonces que decidimos cambiar el rumbo y concurrir al barrio Butaló a verificar la situación de las vecinas y conversar con ellas. A partir de allí se desató una historia que comenzó con estas primeras dos viviendas de Unanue y Las Jarillas, donde se detectó que la empresa que había realizado la obra dos años antes (2014) no las había conectado al caño principal”, precisa.

“Con el correr de los días se empezaron a acercar más vecinos del barrio manifestando que tenían los mismos problemas, pero no sabían a qué se debía”, dice Giorgis.

“Fue así que poco a poco nuestra gestión municipal detectó que no fue un error, ya que había un problema general en todo el barrio porque en realidad las 246 conexiones domiciliarias de cloacas de esa obra ‘nueva’ se habían dejado con los caños viejos de asbesto cemento, cuando el pliego marcaba claramente que debían recambiarse por caños de PVC hasta un metro de la línea municipal”, señala.

“Durante dos años, que se cumplen hoy, podemos decir que desde el municipio hemos hecho en ese barrio mucho, aunque también es verdad que se nota muy poco. Solo por enumerar algunas de las acciones realizadas por nuestra gestión municipal en la zona tendríamos:

* Conexiones domiciliarias de cloaca.

* Instalación de bombas y bypasses para desagotar.

* Contratación de camiones atmosféricos para asistir.

*Personal municipal, camiones desobstructores, maquinarias municipales.

*Reparación de pérdidas de agua crónicas que agravaban el cuadro.

*Contrataciones especiales para ir resolviendo los paliativos.

*Contratación de un ingeniero con vastísima experiencia en la ex Obras Sanitarias de la Nación para determinar el estado de la obra.

*Presentación del municipio como querellante ante la Justicia por verse absolutamente perjudicada nuestra administración municipal por la mala praxis de la obra ejecutada por la empresa Jubete en la gestión de Larrañaga.

* Aporte de pruebas y documentación respaldatoria a esa causa judicial.

“El Gobierno Provincial reconoció que la obra no servía y debía hacerse completa nuevamente: finalmente el año pasado, y ante la resolución de la Justicia Provincial ratificando las irregularidades y sus responsables, el gobernador reconoce que la obra hay que hacerla nuevamente, que es inviable continuar en esa situación y ofrece el financiamiento de la misma a la Municipalidad”, .

La Municipalidad tomó a su cargo los proyectos, la ejecución y el control de la obra”, dice la concejala del FrePam.

50 millones

“La empresa Jubete debería aportar por lo menos 50 millones de pesos a la ciudad”, afirma Giorgis.

“Dado que la ciudad necesita obras en varias zonas, nos parece lógico que si el Estado asume estos gastos cuando en realidad deberían pagarlas los que la hicieron mal, por lo menos 50.000.000 de pesos deberían ser devueltos por la empresa Jubete para destinarlos a otras emergencias de la ciudad que tanto se necesita y de alguna manera compensar los gastos de la obra nueva, como así también todo lo gastado por el municipio en estos dos años, más los perjuicios causados a la Municipalidad y a los vecinos tanto en lo económico como en lo ambiental y sanitario”, precisa.

Pide que “el municipio no lo contrate, además de otras sanciones”. Señala que “es por esto que desde la Comisión Especial de Seguimiento se han seguido aportando evidencias a la causa judicial y se han efectuado recientemente pedidos a Asuntos Jurídicos de la Municipalidad para que el municipio no contrate a esta empresa en ninguno de sus rubros. Como así también otras solicitudes vinculadas a las sanciones a la misma que deberían adoptarse en la causa de la Justicia Federal donde se tramita”.

Con relación a la obra que se desarrolla nuevamente, desde la Comisión Especial creada en el Concejo Deliberante donde participan la mayoría de los bloques parlamentarios, se ha hecho una tarea de aportar con sugerencias que fueron mejorando la ejecución de la primera etapa de la misma sobre calle Macachín, que está cerca de su conclusión, dice la concejala.