¿Cómo manejamos los residuos generados en establecimientos de salud?

La gestión de residuos es uno de los servicios básicos clave para la sanidad de las ciudades y una de las mayores responsabilidades y desafíos de los gobiernos locales. Por ello, en el marco de esta pandemia que afecta a la humanidad entera, es necesario asegurar el bienestar de la población, y evitar la propagación del virus de forma responsable.

Por: Marina Giordana.

La gestión eficaz de los desechos biomédicos y hospitalarios requiere de un proceso apropiado de identificación, recolección, separación, almacenamiento, transporte, tratamiento y eliminación de los residuos, así como de aspectos asociados importantes que incluyen la desinfección, y la protección y capacitación del personal.

Durante un brote como el actual, se generan diversos desechos médicos y peligrosos, incluidos mascarillas, guantes y otros equipos de protección infectados, así como un mayor volumen de artículos no infectados de la misma naturaleza. El manejo inadecuado de estos desechos podría desencadenar un efecto rebote y otras consecuencias en la salud humana y el medio ambiente, por lo que su gestión y disposición final de forma segura es vital como parte de una respuesta de emergencia efectiva.

La potencial enfermedad que pueda resultar como consecuencia de la presencia de organismos patógenos en los residuos, (provenientes de pacientes, terapias biológicas, investigaciones, entre otras fuentes) depende de la coexistencia de:

• un patógeno (= peligro): agente viable, en cantidad suficiente y capaz de producir daño;

• un huésped susceptible (= huésped): individuo que aloja al agente y que por sus características facilita el desarrollo de la enfermedad y

• un entorno (= ambiente): conjunto de factores físicos, biológicos, químicos y socio-económico culturales que intervienen en el proceso salud/enfermedad.

Son aquellos desechos peligrosos que provienen de hospitales, veterinarias, laboratorios y todo tipo de centros médicos.

Con el objetivo de establecer pautas del manejo de Residuos en Establecimientos de Salud durante la Emergencia Sanitaria (COVID 19), en los establecimientos sanitarios, se deben seguir los mismos lineamientos que disponen las “Directrices Nacionales para la Gestión de residuos de establecimientos de salud”

Una adecuada gestión integral de los residuos (tanto interna como externa) minimiza los riesgos para la comunidad y ambiente, satisface requerimientos económicos y legales, y considera las vulnerabilidades de la población potencialmente expuesta.

Es también fundamental asegurar el cuidado de los trabajadores vinculados a estas tareas, asegurando que:

Todo establecimiento debe contar con normas para proteger tanto a los pacientes como al personal.

Utilicen elementos de Protección Personal (EPP) adecuados, lo que incluye protecciones, guantes, calzado de seguridad, máscaras o pantallas faciales y barbijos.

Mantengan higiene de manos frecuente.

Eviten tocarse cara, ojos, nariz y boca con las manos sin lavar.

Es importante que las Instituciones de Salud realicen una gestión adecuada de sus residuos generados, de esa manera permitirá un menor impacto ambiental por los grandes volúmenes de residuos de esta clase que se generarán durante este periodo.

Según los principios del Convenio de Basilea, cada una de las partes debe adoptar las medidas apropiadas para reducir al mínimo la generación de desechos peligrosos y otros desechos en su territorio y para dotarse de adecuadas instalaciones de eliminación a los efectos de un manejo ambientalmente racional de los desechos peligrosos y otros desechos.

Pueden suscitarse riesgos durante el almacenaje, el manejo, el transporte y la eliminación de los desechos infecciosos, por lo cual los generadores de desechos biomédicos y sanitarios son responsables del empaque seguro, el adecuado etiquetado y la autorización del destino de los desechos que hayan de transportarse a otro sitio.

Es por ello que todos los actores deben cumplir con la legislación vigente lo que permitirá un manejo interno correcto de los residuos generados en los establecimientos de salud, el transporte, tratamiento y disposición final.

Las instituciones médicas deben fortalecer la gestión y el personal que proporciona logística y servicios, organizar y llevar a cabo capacitaciones, instarlos a dominar los requisitos básicos para el manejo de desechos médicos y realizar sus deberes con seriedad. Para intensificar esfuerzos para mejorar el medio ambiente, eliminar oportunamente los desechos médicos, evitando acumulación de todo tipo de residuos, y esforzarse por crear un ambiente saludable e higiénico.

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