“Desde el momento que se tomó la decisión de tercerizar trabajos propios, la responsabilidad cae directamente sobre el supermercado”, sostuvo, por lo cual ayer decidieron trasladar la protesta a la puerta “para lograr que los responsables del supermercado dialoguen con el gremio. El conflicto es con Carrefour, no con la gente de Gualdesi”, subrayó, que es la empresa contratada por la firma para el sector de verdulería.

“Luego de la protesta, se generó una presentación de Carrefour al Ministerio de Trabajo, pidiendo la conciliación obligatoria, y aceptamos levantar la medida ante este pedido”, dijo.

La audiencia estaba prevista para hoy a la mañana, pero el conflicto llevaba su tiempo, por lo cual Rivarola cuestionó la pasividad del Ministerio de Trabajo: “El conflicto era vox populi, pero hasta que no entró la denuncia de Carrefour solicitando la intermediación, no se tomó ninguna iniciativa”, sostuvo.

Precisó que “hay 8 empleados en conflicto sobre una planta de 24 personas. Son los únicos que realizan tareas dentro del supermercado, por eso hablamos de igualdad de tareas y de remuneración. Los que están afuera están dentro del ámbito de comercio normal, no dentro del supermercadismo. Para estos 8 trabajadores reclamamos la igualdad salarial respecto de los sueldos de Carrefour, que ronda entre el 20 y 30% de diferencia, también reclamamos el adicional domingo, porque el resto de los empleados de Gualdesi no trabajan en domingo sino solamente los que están dentro de Carrefour. El adicional domingo es un decreto nacional acordado con la Federación de Comercio, que establece un día más de salario como valor del adicional, y hablamos entre 1.200 y 1.400 pesos, pero esta gente les está pagando 200 pesos”, dijo de Gualdesi.

Subrayó que Carrefour “es el único supermercado que terceriza actividades que le son propias. Ellos argumentan que son malos en la distribución de verduras, que no tienen depósitos en la Patagonia y que por eso tercerizaron. Gualdesi maneja todas las verdulerías de la Patagonia de Carrefour, no solamente esta”, apuntó.

También dio cuenta de la profundización de la crisis que está derivando en una flexibilización laboral de hecho: “Hoy la flexibilización laboral está pasando de forma voluntaria, sin necesidad de que pase por el Congreso sino que pasa por la realidad. Ahora tenemos en puerta un conflicto con Tecnomyl, una empresa modelo que el otro día fueron a visitar, donde nos sacaron una empresa de limpieza con tres empleados de comercio. Hay una persona que armó una cooperativa y puso tres monotributistas a limpiar la fábrica. Las condiciones de trabajo se están modificando en los hechos, más allá de lo que quiera tratarse en Diputados”, insistió.

Agregó que “hay comercios que están pidiendo acuerdos de rebaja salarial, por medio de la baja de la jornada. Tenemos un conflicto en una de las mueblerías más grandes y más conocidas, que es Montecarlo, y estamos a punto de cerrar un acuerdo, porque el pedido es la reducción de jornada de los trabajadores por lo menos por cuatro o cinco meses, hasta ver qué pasa con la situación”.

Aun con una caída en las ventas en general, el viernes firmarán un acuerdo paritario que “replica el acuerdo nacional para octubre, noviembre y enero. Pese a la crisis, terminamos acordando los puntos conforme al acuerdo nacional”, concluyó.