Después de que el presidente Mauricio Macri anunciara una reforma laboral, las organizaciones gremiales de todo el país manifestaron su rechazo a cualquier modificación que atente contra los derechos laborales conseguidos.

En este marco, desde la CTA de los Trabajadores de Córdoba aseguraron que la reforma "plantea transformaciones que perjudican claramente a los trabajadores".

"Supone un nuevo mecanismo de ajuste para los trabajadores y trabajadoras, que hasta ahora somos los únicos que venimos 'cediendo' derechos en función de una supuesta crisis de la que no somos en absoluto responsables", argumentaron mediante un comunicado.

Uno de los principales puntos cuestionados por la central obrera fue el "blanqueo laboral” ya que, según entienden, "reduce la posibilidad de defensa de derechos en litigio por parte de trabajadores en negro".

Ello se suma al hecho de que la reducción de aportes patronales "desfinanciará al ANSES y atacará el sistema solidario del régimen de jubilaciones y pensiones".

Además, desde la CTA cordobesa indicaron que la limitación de la responsabilidad solidaria "deja en un lugar de mayor precariedad a los trabajadores tercerizados que por lo general son víctimas de fraude laboral".

Respecto a la intención del gobierno consistente en implementar un sistema de banco de horas, los gremios nucleados en la CTA aseguraron que ello provocará "una flexibilización horaria" que coarta las horas extras y extiende la jornada.

"Junto con esto, se proyecta crear nuevas categorías de trabajo con menos derechos, como 'el trabajador autónomo económicamente dependiente' que, facturando el 80 % de sus ingresos anuales a una empresa exclusivamente, queda excluido de la Ley de Contrato de Trabajo", añadieron.

Y repudiaron: "Se reeditan las pasantías de los años 90’, y la figura del trabajador 'independiente' con hasta cuatro 'colaboradores' a cargo. Se revoca la irrenunciabilidad de los derechos que surgen de los contratos individuales, se alienta la polivalencia funcional dando lugar a la arbitrariedad por parte del empleador de modificar condiciones de trabajo, y también se propone reducir el plazo de inicio de acciones legales de 2 años a 1 año".

Frente a estas modificaciones sobre la legislación laboral, la CTA Córdoba convocó a todas las organizaciones de la provincia a aliarse para impedir la materialización de la reforma. 

"Expresamos nuestro absoluto rechazo a las reformas propuestas y convocamos al conjunto de las organizaciones sindicales y sociales de Córdoba a unir esfuerzos para frenar el avance de este proyecto de expoliación y ajuste", anunciaron.