Corrupción en IOMA: Pablo Di Liscia continúa sus negociados con los prestadores domiciliarios

Corrupción en IOMA: Pablo Di Liscia continúa sus negociados con los prestadores domiciliarios

Pese a la causa judicial que complica a las sociedades nucleadas en la Cámara de Empresas de Internación Domiciliaria (CAMEID), estas permanecen hasta la actualidad en el listado de prestadoras habilitadas por el IOMA. No sólo eso, estas firmas asociadas son las únicas que cobran por sus servicios, gracias al guiño de Pablo Di Liscia.

 

No ocurre lo mismo con las empresas que están fuera de la CAMEID: en un acto de favoritismo que es precedido por una contundente causa judicial que lleva adelante Álvaro Garganta, la mayoría de ellas está sin cobrar desde octubre del 2017.

Las empresas beneficiadas con esta distribución caprichosa de fondos están siendo investigadas por una causa judicial que se circunscribe a un período muy corto de tiempo, que va del año 2013 al 2015, y que tiene por objeto la defraudación económica y el desvío de recursos en medicamentos, prótesis, medicación e internación domiciliaria.

La causa, cuyo objeto debiera extenderse hasta la actual gestión de Di Liscia, omite hacer mención al tráfico de influencias. Es decir, qué conexiones existen entre los dueños de las empresas y las altas líneas de la mutual estatal que controla desde las sombras el propio Daniel Angelici.

Según fuentes judiciales, este círculo chico no incluiría a los directivos de la línea media de IOMA, que estarían ajenos a la dinámica de funcionamiento que incluye a la CAMEID, intentando comprender el trasfondo oculto a la hora de tomar decisiones para evitar quedar mal parados.

Por otro lado, trascendió que la investigación de Garganta estaría dejando de lado un estudio pormenorizado de la actividad que lleva a cabo cada empresa. Por ejemplo, según un testigo reservado que dialogó con REALPOLITIK, en Mar del Plata una de las firmas hizo una compra de ambulancias pero nadie hasta ahora las ha visto trasladar pacientes, solo se ha podido corroborar que estos móviles circulan por el extenso distrito costero sin que la policía los pueda detener.

La persona clave en esta reducida red de corrución, que comenzó en 2013 y continúa hasta el día de hoy, es Nicolás Galoppo, gerente de Intergemed SRL y presidente de la CAMEID.

Finalmente, un dato de color. Según los propios trabajadores, días atrás, cuando no se permitía el ingreso al edificio central de IOMA ubicado en la calle 46 de La Plata, el empresario amigo de Di Liscia ingresó por la puerta principal del organismo sin ningún tipo de problemas, como si se tratara de una máxima autoridad del organismo. 

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