Cuáles son las expectativas para los salarios ejecutivos en 2020

Cuáles son las expectativas para los salarios ejecutivos en 2020

Las sucesivas devaluaciones dejaron a los sueldos por debajo de la inflación en 2019, y no se espera que se puedan recuperar esos puntos perdidos durante el próximo año.

A pocos días de que comience el 2020, los expertos en Recursos Humanos se animan a decir que, como máximo, los salarios apenas igualarán a la inflación durante el próximo año, dejando casi en el terreno de lo imposible recuperar los más de 15 puntos perdidos durante los últimos dos años. En este escenario, el gobierno de Alberto Fernández prometió a sindicatos que dará un aumento por decreto tanto a trabajadores privados como estatales. En cuanto a los sectores, la banca es el mejor posicionado y se espera que retail y consumo puedan equilibrar un poco sus ingresos hacia el segundo semestre.

Estas noticias son poco alentadoras, sobre todo teniendo en cuenta que en 2018 el salario perdió en promedio unos 10 puntos respecto de la inflación y en 2019 esa pérdida está cerrándose entre los 5 y 7 puntos. "Por esto, cada vez más empresas tratan de dar de tres a más ajustes salariales por año, para ir mirando cómo evolucionan los aumentos de precios, cuando antes pautaban de entrada hacerlo en dos oportunidades", explica Marcela Angeli, directora del área de Talentos y Compensaciones de Willis Towers Watson

Incluso, según el informe Acciones Salariales 2019 de la mencionada consultora, el 38% de las empresas están analizando dar ya el primer aumento en enero para salir a compensar los valores en baja de los ingresos, y el 10% lo haría en febrero. A esto, hay que agregar que "hay compañías que están adelantando un bono adicional al aguinaldo (buscando estar un paso adelante por si el nuevo gobierno otorga uno) y pagaron este último en los primeros días de diciembre. Las organizaciones son conscientes del deterioro con el que se termina 2019", observa Maximiliano Schellhas, director general de Staffing de Randstad Argentina.

Según Schellhas, las firmas piensan dar entre un 42% y un 38% de ajuste, -22% entre marzo y abril y 20% entre septiembre y octubre-. "Esto es en promedio, porque hay sectores que están mejor posicionados, como banca que ronda un 44% y otros que pierden, como construcción que está por debajo del 38%. Sólo un 25% de las compañías tiene definido este esquema y los números, el resto todavía lo está analizando", suma el directivo de Randstad.

"Esto deja poco margen al aumento por mérito lamentablemente, por eso la creatividad de las empresas a la hora de pensar propuestas de valor personalizadas como parte de un paquete de compensación atractivo es clave. Además del auto, jardín, prepaga, formación ejecutiva u otras propuestas, entran en juego los beneficios monetarios a largo plazo como acciones, Phantom shares, LPIs, stock options, vinculados a moneda dura en el caso de las multinacionales, que resultan cada vez más atractivas", opina Daniel Iriarte, director asociado de Glue Executive Search, Headhunter especialista en Top Management.

Las compañías darán aumentos por cuatrimestre. En los primeros dos apuntan a quedar por arriba de la inflación y en los segundos por debajo. A su vez, los sindicatos están reclamando la cláusula gatillo.

En compensación, muchas empresas diversifican los beneficios para suplir la pérdida de poder adquisitivo de sus colaboradores. Es el caso de Grupo Gestión, que además de monitorear los índices de inflación para poder mantener y superar esos porcentajes, complementan con beneficios como bonos, reintegro por gastos de guardería, colegio, flota de celulares y autos corporativos, entre otros. "Además, brindamos información importante y actualizada para que los colaboradores puedan mejorar sus finanzas personales", cuenta Juan Pablo de Mendonça, gerente de RR.HH.de la firma.

Las más afectadas

Todos los analistas señalan que las Pymes fueron las más golpeadas en los últimos años. En este sentido, "se entiende que el gobierno entrante va a trabajar en la recomposición del aparato productivo, estimulará el consumo, los préstamos, para mover el mercado interno y reactivar la economía. Si eso se logra, será muy positivo para el país en el contexto en el que estamos", observa Iriarte.

"La incertidumbre más grande del empresariado desde las PASO es si económicamente la Argentina tocó fondo o la suma del pacto social y el paquete de medidas económicas pueden permitir a las empresas al menos un semestre de planificación luego de tres meses de incertidumbre total. Todo en un contexto récord de inflación y pobreza en los últimos 16 años, sumado a las medidas que está adoptando el gobierno en un giro que muchos analistas catalogan de 180 grados opuestos al del gobierno anterior: aumento de retenciones, doble indemnización, dólar turista, acuerdo de precios y paz social por 180 días en apenas una semana", analiza Miguel Terlizzi, presidente de HuCap.

"Paradójicamente surgen expectativas respecto a la escalada de conflictos laborales, incluso aunque la presión sobre los costos laborales en paritarias disminuya por el pacto social que, se da por descontado, formará parte del paquete de medidas del nuevo gobierno. Habrá menor conflicto gremial en paritarias sobre los aumentos salariales pero, por ejemplo, si lo habrá en el otorgamiento del bono de fin de año que ya no sería por decreto a todos los trabajadores sino que se consideraría hacerlo por actividad", agrega Terlizzi.

"La expectativa, en general, para 2020 no es buena si hablamos en concreto de un fuerte crecimiento o significativa suba de actividad. Sin embargo, sí hay cierto optimismo en relación a cambios que podrán beneficiar al sector empresarial y a trabajadores en simultáneo; y se espera también un paquete de medidas que puedan impulsar a las Pymes, y que a su vez potencien el consumo", aclara Jimena Ferreño, directora de Talent Recruiters.

Los fuera de convenio

Según la consultora Mercer, en el segmento de los colaboradores fuera de convenio, los sectores que mejor están cerrando sus incrementos salariales en 2019 son: bancos, seguros, automotriz/autopartista, high tech, agro y energía. Por otra parte, entre los que tuvieron menores incrementos se encuentran las industrias de medios y entretenimientos, servicios, químicas y retail.

Las empresas estimaron un incremento salarial anual de 40%, alineado al estimado de inflación para el año siguiente.

"En lo relativo a las proyecciones 2020, según un relevamiento de noviembre, las empresas estimaron un incremento salarial anual de 40%, alineado al estimado de inflación por las empresas para el año siguiente", agrega Mercedes Bernardi, líder de Productos de Career de Mercer. Los aumentos salariales se distribuirán de un modo similar a lo ocurrido en 2019.

Como cada año, los profesionales que se desempeñan en puestos jerárquicos deberán negociar en forma personal sus ajustes salariales, de acuerdo a la planificación de las instancias de recomposición de cada empresa. "Si bien las industrias más competitivas lo continuarán haciendo hasta 4 veces por año, en general los ajustes se producirán dos veces, en marzo/abril y septiembre/octubre. Aunque hay sectores menos competitivos que seguirán ajustando solo una vez por año", aclara Leandro di Nardo, director de NUMAN.

El problema es que el ajuste salarial seguirá estando por debajo de la inflación, y los talentos seguirán perdiendo poder adquisitivo. "Distinta es la situación de aquellas empresas que deciden alinear los ajustes de su personal fuera de convenio, con los acuerdos establecidos por el convenio colectivo de trabajo al cual pertenece cada industria", cuenta Di Nardo.

"En 2020 seguramente ocurrirá lo mismo que en este 2019, con valoraciones semestrales de aumentos de hasta el 10% para quienes han desarrollado una perfomance discreta, un porcentual más cercano a la inflación para quienes están cumpliendo en forma correcta con sus obligaciones y superando objetivos, y un ajuste similar al índice inflacionario a quienes sobre cumplieron sus metas. El gatillo del ajuste salarial son y seguirán siendo los niveles de desempeño de cada profesional", señala el director de NUMAN, quien agrega que este tipo de prácticas suele ser usada para enviar mensajes o presionar a los colaboradores. Incluso en los altos mandos, en 2020 mantener la capacidad adquisitiva será todo un logro.

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