A una década de la Noche de las Tizas, los docentes volvieron a repudiar a Romero

A una década de la Noche de las Tizas, los docentes volvieron a repudiar a Romero

El 1 de abril de 2005 fue antecedido por distintos hechos que anunciaban una arremetida contra los docentes. Un paro sin precedentes durante el gobierno de Juan Carlos Romero, con salarios que llegaban a poner a los docentes debajo de la línea de pobreza. Escuelas destruidas. Una grilla salarial inentendible.

Y negociaciones con el histórico dirigente de la ADP, Virgilio Choque -hoy fallecido-, cuyos presuntos aumentos el cajero se encargó de demostrar que no eran tales. La noche anterior a ese primero de abril, la detención de militantes de Barrios de Pie y el vallado de la Legislatura dos cuadras a la redonda por la apertura de la Asamblea Legislativa, fueron el preludio de lo que iba a empezar a acontecer cerca de las 19, cuando empezó la represión más nefasta que se recuerde contra el sector al menos en Salta. 

Otro pedido de justicia

Ayer, nuevamente, se volvió a pedir Justicia y dejar caer la impunidad de quien se señala como el máximo responsable de la represión, por haber sido ejecutada durante su gobierno.

El martes, algunos docentes volvieron a hacer paro, esta vez adhiriendo al convocado por la UTA, que en Salta estuvo encabezado por el gremio transportista local, y por el dirigente de los camioneros, Jorge Guaymás. Esta vez el reclamo era por el descuento que se le hace a algunos por el mínimo no imponible, en tanto sus sueldos pasan los 15 mil pesos. No es menor el dato de Guaymás. 

Aquel primero de abril de 2005 fue quien (junto a otros), ingresó a la Legislatura Provincial tomado del brazo de los referentes máximos de las 62 organizaciones que, con ese gesto, demostraron su apoyo a las políticas que venían siendo expandidas por el gobierno de Juan Carlos Romero en contra de los trabajadores docentes.  

A la noche, mientras se mantenía una vigilia en la Catedral por la muerte del Papa Juan Pablo II, y tras una marcha que se había realizado por las calles de la ciudad, docentes (la mayoría mujeres), se apostaron en la Plaza 9 de Julio. Con las cámaras televisivas cerca por la vigilia montada, la orden fue la represión hasta el despeje total, sin importar de quien se tratara, ni de los métodos utilizados sean gases lacrimógenos, arrastre de los pelos, golpes de puño o patadas. 

Algunos especialistas de la Salud Mental indican que algunos pacientes que llegan desde la docencia, son aquellos que sufrieron la brutal represión, que aún quedaron con secuelas pese a que los moretones se borraron.

Los legisladores del PO dispusieron ayer en la apertura de la Asamblea Legislativa carteles alusivos a la Noche de las Tizas. Desde su sector gremial, Tribuna Docente, en tanto, se acusó el hecho de que Romero siga impune al igual que los policías que golpearon a los docentes. Agregaron que "está claro que (el gobernador Juan Manuel), Urtubey le ha garantizado la impunidad  como en tantos casos de represión contra los trabajadores de los cuales Romero fue responsable".

Proyección y marcha

Para terminar, los docentes se reunieron en la plaza 9 de julio, en donde proyectaron el documental 'La Noche de las Tizas', de Héctor Alí y tras ello realizaron una marcha recordando aquella noche.

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