Por: Luis Autalan.

A horas del viernes indignante que padecieron los jubilados para cobrar sus ingresos los efectos colaterales son intensos. "A los bancos no les gusta atender a beneficiarios de la AUH", sentenció Sergio Palazzo titular de la Asociación Bancaria (AB), en diálogo con el programa Toma y Daca que se emite por la AM 750. Sin soslayar que el dirigente sindical también está en el ojo de la tormenta por la trama errática de las últimas horas, esas palabras pusieron acento en una denuncia histórica de los piqueteros: el destrato que reciben de algunos sectores de la sociedad, en este caso de núcleos de la banca.

Desde el denominado "Triunvirato San Cayetano", el referente de la CTEP y la Unión de Trabajadores de la Economía Popular (UTEP) Gildo Onorato analizó ese punto y el escenario general en tiempos de pandemia para los desocupados en una entrevista con BAE Negocios:

—¿Les tocó padecer también una jornada para lamentar en plena emergencia?

—La mayoría de las personas que cobran los programas sociales y AUH los perciben a través de las entidades bancarias. Pero corresponde recordar, aunque parezca obvio que en los barrios populares no solo no hay bancos, sino que hay muy pocos cajeros, eso también expresa la desigualdad. En argentina el 40% de la economía es informal, por lo tanto es lógico que se consuma con efectivo en los sectores populares. Además hay un sector, de lo que algunos señalan como la pobreza estructural, al cual la única forma de medirlo es en el "cara a cara". Ellos no entran a sitios para anotarse y mucho menos los encontrás en un excel, la tecnocracia es poco efectiva en esta tarea.

—El martes el Gobierno sentará a la mesa a empresarios, la CGT y referentes sanitarios. ¿Consideran que debieron haber sido convocados?  ¿Cuál es la lectura que hacen de ese foro que apunta a retomar algo de la actividad?

— Es importante parar la caída económica y buscar una solución en el mediano plazo, hoy el abastecimiento y la política de ingresos de emergencia son fundamentales, pero hará falta mucho más. Desde ya urge poner rápidamente en funcionamiento una política agresiva de infraestructura social con trabajo cooperativo y con trabajadores y trabajadoras de la economía popular. Nosotros lo que hacemos lo hacemos por nuestros compañeros y compañeras: el 90% viven en barrios populares, Nos convoquen o no, nosotros nos estamos organizando para enfrentar esta crisis sanitaria pero principalmente las problemáticas sociales, que será mucho más dolorosa, de lo que era antes del Covid19, para nuestro sector.

—¿De qué forma se organizan en esta “emergencia de la emergencia”?

—Las redes comunitarias de nuestro pueblo sirven para afrontar de forma colectiva esta realidad, y es eso lo que estamos planteando: conformar comités, organizarnos en el territorio, planificar la llegada de la asistencia con las autoridades y de esa manera construir una respuesta que les acerque algo de alivio a lo que se está sufriendo hace mucho tiempo y se profundizó estas semanas.  

Tenemos una tarea que está  vinculada al trabajo social y comunitario, ahí sostenemos la alimentación a través de viandas, entrega de alimentos secos y frescos y meriendas para los mas chiquitos.

—Desde la CGT le remarcaron a este diario que están colaborando con ustedes.

—Hay distintos sindicatos de todo el país, como también la Juventud Sindical de esa central obrera, que colaboran con sus colectas, campañas solidarias y además con logística para que lleguen productos y materiales en los comedores, merenderos y más. Se trata de la solidaridad de esos compañeros para cientos de miles de familias que dependen del trabajo que realizan las redes comunitarias, el cual desarrollaron desde hace años al compás de la crisis y ahora en un escenario que ya era delicado pero que agravó esta pandemia.