“Aún recuerdo el consejo oficial de hace 5 años atrás - “Giuliano, usted está confundido. La seguridad no es de nuestra competencia”. Esa sugerencia, el miedo a la “estigmatización” y la persistencia en considerar a la inseguridad como una “sensación”, hizo que los rosarinos pasáramos por 5 años de indiferencia del Estado en materia de seguridad, y así nos convertimos en una de las ciudades más violentas de la Argentina”, indicó el edil y agregó:

“El reconocimiento de que los problemas de seguridad de los rosarinos eran también los problemas del Municipio llevó a que el oficialismo declarara finalmente la Emergencia en Seguridad presentada en el mes de octubre del 2011 y se tomara el primer paso para reparar todo lo que no se hizo durante tantos años”.

La Emergencia en Seguridad fue dispuesta por la Ordenanza Nº 9609 del 1º de Septiembre de 2016 y produjo algo inédito: el Concejo Municipal le otorgó a la Intendenta Fein la posibilidad de destinar partidas presupuestarias a la prevención del delito y la facultad de valerse de procedimientos abreviados para realizar compras destinadas con ese motivo. En este tiempo se adjudicaron ambulancias para el SIES, se incorporaron mas de 8000 luminarias en 12 barrios, se compraron 64 vehículos para el control de las calles, alarmas comunitarias, botones de pánico y se incorporó videovigilancia a unidades del transporte público de pasajeros.

Para Giuliano, “El camino sigue siendo insuficiente, falta mucho más”.

“Falta concretar la instalación de alarmas comunitarias, más cámaras de videovigilancia en lugares de fuerte vulnerabilidad que estén controladas por la policía, mayor presencia de fuerzas de seguridad en las calles, entre otros tantos proyectos que quedaron a mitad de camino de los 28 que fueron aprobados el día de la declaración”.

“Hoy, en Rosario, los problemas de seguridad no cedieron. Continúan las muertes por luchas entre bandas disputando territorio, se suceden fugas masivas de presos, la ciudad sigue siendo un negocio de venta mayorista de droga”.

“Queda mucho por hacer para volver a recuperar las calles de Rosario. La ciudad sigue en emergencia”, concluyó Giuliano.