300 empleados tomaron una fábrica de calzado y denunciaron que no les pagan hace 4 meses

300 empleados tomaron una fábrica de calzado y denunciaron que no les pagan hace 4 meses

Trabajadores de la fábrica de calzados y productos textiles GGM tomaron la planta ubicada en Las Flores para exigir que les abonen los sueldos atrasados.

Mientras el presidente de la Nación, Mauricio Macri, de recorrida con la precandidata a senadora por Cambiemos, Gladys González, en Dock Sud, aseguró que "el año que viene vamos a crecer más que este" en relación a la actividad económica; 300 trabajadores de la fábrica de calzados y productos textiles GGM tomaron la planta ubicada en Las Flores y exigieron el pago de los sueldos que adeudan desde hace cuatro meses.

En el marco de la campaña legislativa, el Jefe de Estado en el partido de Avellaneda le pidió al electorado: "créanme, créanme" y continuó: "créanme, el año que viene vamos a crecer más que este".

Mientras tanto, a 194 kilómetros, 300 trabajadores de la planta que produce el calzado para las marcas Pony, Signia y Asics tomaron la fábrica para exigir que regularicen los pagos y les aclaren su situación laboral.

En conversación con AM 750, uno de los trabajadores afectados, Omar Arcebio, explicó que "tomamos la fábrica porque la patronal nos dio licencia por dos meses y no apareció más", a pesar de que les había prometido un pago del 75% del salario adeudado, pero que nada ocurrió.

La licencia había sido otorgada por dos meses con el objetivo de paliar las consecuencias de la caída de la producción que se generó, según expresaron los trabajadores, por la apertura de las importaciones en el sector.

De todas maneras la situación no mejoró y al día de hoy, los empleadores "tiene con nosotros una deuda atrasada de 15 millones de pesos que no pagan hace cuatro meses", contó Arcebio, quien además contó que el caso llegó hasta el Ministerio de Trabajo y de esa manera lograron empezar a "cobrar un subsidio de 3 mil pesos" en el marco del Programa de Recuperación Productiva (Repro).

El trabajador damnificado aseguró que no es suficiente para cubrir las necesidades de sus familias por lo que consideró que "seguimos varados" y agregó: "los dueños siguen sin aparecer".

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