Desde el próximo lunes, la ciudad comenzará a reemplazar el agua potable de perforación por la del nuevo acueducto conocido como “Desvío Arijón”, abastecido del río Coronda.

De los sietes tanques de agua que tiene en la actualidad Santo Tomé, cuatro de ellos estarán abastecidos con agua del acueducto a través de tres cisternas que se encuentran bajo de la tierra.

En primer lugar será abastecida la cisterna norte, encargada de suministrar el recurso al Tanque Central. Dicho tanque abastece cerca de 13 mil conexiones, lo que representa el 60 por ciento de la población provista con agua corriente.

Con el tiempo se sumarán las otras dos cisternas; una ubicada en el sur de la ciudad (que abastece a los tanques General Paz y Zazpe) y otra ubicada en el Oeste (que abastecerá a Adelina Oeste).

En el transcurso del año se trabajará para poder conectar los tanques de Adelina Este, Loyola y Villa Libertad.

Durante el acto, que se llevará a cabo el próximo 5 de febrero, se abrirá una canilla “simbólica” y a partir de ese momento el tanque comenzará a llenarse con agua del acueducto. Además, la intendencia de Santo Tomé firmará el convenio para adherirse al sistema, junto con el gobernador de la provincia, Miguel Lifschitz.

Resta definir la actualización tributaria 

En el marco de la obra del agua del acueducto, el pasado 27 de diciembre de 2017, el Concejo Municipal aprobó el acuerdo entre Municipio y Provincia, pero resolvió pasar la reforma tributaria a Comisiones en el mes de marzo de 2018.

La oposición, representada en los concejales de Cambiemos y del PJ, acompañó la suscripción del convenio entre la Municipalidad de Santo Tomé y la Provincia de Santa Fe, por el cual la segunda parte se compromete por cuatro meses a proveer de manera gratuita el suministro de agua potable en cantidad y calidad suficiente proveniente del Acueducto Norte I – Desvío Arijón. Sobre este punto, el oficialismo se abstuvo de votar sosteniendo: “No podemos brindar el agua si no sabemos cuánto se le va a cobrar al vecino”.

En la misma sesión, los concejales Ackerley, Reutemann, Alí, Alvizo, Zamora y Schmidhalter votaron en contra del proyecto de ordenanza presentado por parte del Ejecutivo Municipal en el que se aspiraba a modificar el Artículo 20 de la Ordenanza Tributaria Municipal N° 2823/10, en la cual se estipulaba un adicional a la Tasa Retributiva de Servicios Sanitarios, para todos aquellos vecinos y vecinas de zonas provistas con agua proveniente del Sistema de Grandes Acueductos de la Provincia de Santa Fe. Al respecto, argumentaron su postura, de aprobar el convenio pero que la reforma tributaria sea discutida en Comisiones del Concejo, en la posibilidad de que el costo del agua sea elevado: “No podemos fijar el precio si no sabemos cuánto se consume”, insistieron. Acerca de este tema, los ediles del bloque socialista, Alejandra Chena y Gabriela Solano, y de la UCR, Martín Giménez, habían presentado la moción de pasar a cuarto intermedio en marzo próximo.