La alta demanda de vacunas por parte de argentinos que viajarán a Brasil ocasionó un eterno trajinar de largas colas en busca de números para la atención, como así también una interminable procesión en distintos distritos, que incluye a Lomas de Zamora como una de las comunas donde se ofrece la aplicación recomendada por el Ministerio de Salud. Pero justamente ayer, se acabaron las dosis y la desesperación fue general.

"Venimos desde zona norte buscando un lugar oficial donde poder vacunarnos y acá tampoco pudimos, y ya estamos apurados. Hay mucha demanda. Hay gente que viene de todos lados", dijo a LA TERCERA una pareja que ayer buscaba su vacuna en forma infructuosa entre un centenar de personas, al tiempo que se aseguraba que habría solo 150 dósis."Recorrimos un montón de hospitales y centros vacunatorios privados y no hay más vacunas. Me dijeron que hasta febrero no va a haber."

Ante los casos de fiebre amarilla, los argentinos que van a viajar a Brasil comenzaron a aplicarse la vacuna contra dicha enfermedad. Sin embargo, la demanda es tanta que los centros de salud se ven desbordados de gente.

La queja de los vecinos reunidos en torno al centro de salud primaria fue mayúscula al escuchar luego del mediodía que ya no habría más turno por la falta de ampollas para aplicar.

Lo que se vivió ayer en el Dispensario Gregorio Araoz Alfaro (Hipólito Yrigoyen 10043, Temperley y atiende de 8 a 13), es similar a lo que está pasando en otros lugares habilitados para vacunar, teniendo en cuenta que éste punto en Lomas de Zamora, es el único punto de Zona Sur donde se aplica la vacuna.

Según trascendió extraoficialmente, para hoy jueves, debería haber más vacunas para atender tan alta demanda, poco común para el dispensario de Temperley, pero también existen las voces pesimistas que aseguran que desde otros vacunatorios ya alertan que no habrán mas ampollas.

Sobre esta situación, las entidades que nuclean el trabajo por la salud salieron a aclarar que hay un problema de abastecimiento y Marcelo Peretta, secretario general del Sindicato Argentino de Farmacéuticos y Bioquímicos (SAYB), sostuvo que es responsabilidad del Estado "el cuidado y prevención de los ciudadanos acerca de la fiebre amarilla y que el Gobierno no tomo las precauciones necesarias".

Además, alertó sobre las posibilidades de muerte en chicos y que la ausencia de vacunas en Argentina es por la falta de precaución en la política sanitaria.

Sostuvo que "la ausencia de vacunas contra la fiebre amarilla" es responsabilidad del Estado y "se da porque no compraron la cantidad suficiente". El también secretario de Salud de las 62 Organizaciones Peronistas, recordó cuando "la Organización Mundial de la Salud, hace un año y medio, alertó sobre este rebrote en Brasil y dijo, claramente, que Argentina es un país que tenía que tomar las precauciones del caso con respecto a esta patología".

Sobre la sensibilidad con la que los especialistas del Gobierno hablaron de la fiebre amarilla en Argentina, Peretta calificó de "desinformados" a los funcionarios que recomendaron a la población vacunarse al menos diez días antes de un eventual viaje al país carioca. "El prospecto del medicamento dice que se necesita al menos esa cantidad de tiempo para desarrollar los anticuerpos y, en promedio, tarda 30 días en desarrollarse la defensa", explicó el farmacéutico y bioquímico.

El dirigente del SAYB le apuntó al Estado por la "grave falta de política sanitaria". "La OMS lo había advertido hace tiempo", insistió. "Si la fiebre amarilla agarra a un chico que no tiene las defensas altas, lo mata. Ruego a Dios que no pase nada".

Sin certificado

El ministerio de Salud de la Nación informó que Brasil no solicita el certificado de vacunación contra la fiebre amarilla para el ingreso de viajantes.La fiebre amarilla viral se transmite por la picadura de un tipo de mosquito, que previamente ha picado a una persona enferma, en general son del género Aedes (los mismos que transmiten los virus de Zika, la fiebre chikungunya y el dengue), y los mosquitos Haemogogus, que se encuentran sobre todo en la selva.

Se llama fiebre amarilla porque a muchos de los que se enferman se les pone la piel de ese color (ictericia), y los síntomas iniciales pueden ser similares a los de una gripe e incluir fiebre, dolor de cabeza, vómito y dolores musculares, mientras que a medida que la enfermedad progresa sangran las encías y la orina también contiene sangre.

Según datos del ministerio de Salud no hay un tratamiento específico para la enfermedad, si no que se atacan los síntomas, pero debe existir una consulta médica ya que puede agravarse y provocar la muerte.

Para dudas o consultas sobre fiebre amarilla se puede consultar a la línea 0800-222-1002.

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