Los cuatro consejeros del randazzismo mantuvieron su postura a pesar de la abrumadora mayoría y del clamor público para ir en agosto con lista única y Cristina como candidata.
En el tintero quedó el paso de comedia que significó el teléfono descompuesto entre Fernando Espinoza y Florencio Randazzo, que recurrió a artimañas para no darse por invitado y faltar a la reunión. Ayer, sus voceros dijeron que estaba "recorriendo una fábrica".
La Mesa de Acción Política convocada por el peronismo bonaerense anoche cerró sin definiciones electorales. Los cuatro consejeros que se enrolan en el randazzismo bancaron, en absoluta minoría, la idea de ir a las PASO, una posibilidad que, por ley, no puede negársele, todavez que aseguran tener 30 mil avales y los requisitos legales cumplimentados.
La reunión de anoche comenzó en torno a las 19 y recibió un informe de la Comisión de Economía que integran Silvina Batakis, Débora Giorgi y Roberto Feletti y que se debatió durante la primera hora del encuentro.
A continuación comenzó el debate político electoral, condimentado por una declaración unánime de los intendentes de la tercera sección electoral -sur del Conurbano, bastión del peronismo- a favor de una candidatura "única" de CFK, en los términos expresados por Martín Insaurralde, intendente de Lomas, dos días atrás.
"Queremos a Cristina en el Congreso para frenar el ajuste que está realizando Cambiemos" declararon Martín Insaurralde (Lomas de Zamora) y Patricio Mussi (Berazategui). También participaron Fernando Espinoza (Presidente del PJ), Fernando Gray (Esteban Echeverria), Mariano Cascallares (Almirante Brown), Jorge Ferraresi (Avellaneda), Gustavo Arrieta (Cañuelas), Mario Secco (Ensenada), Hernan Yzurieta (Punta Indio), Aníbal Regueiro (Presidente Perón) entre otros intendentes y referentes de la sección, como la diputada Dulce Granados, de Ezeiza.
Durante la reunión de la mesa de acción política, cada uno de los consjeros expuso sus criterios respecto de la elección. La idea fue dejar en evidencia la posición minoritaria del randazzismo, que sólo contó con cuatro representantes frente a 35 opiniones contrarias a ir a las PASO, lo cual no fue óbice para sostener la estrategia.
Es que, como habían anticipado en la previa, la comitiva compuesta por Fernando “Chino” Navarro, Oscar Romero y Julián Domínguez ratificó su ya conocida posición.
En el tintero quedó el paso de comedia que significó el teléfono descompuesto entre Fernando Espinoza y Florencio Randazzo, que recurrió a artimañas para no darse por invitado y faltar a la reunión. Ayer, sus voceros dijeron que estaba "recorriendo una fábrica".
Comentá la nota