El Gobierno tildó de político el paro y lamenta acuerdo por obras sociales

El Gobierno tildó de político el paro y lamenta acuerdo por obras sociales

El oficialismo lamentó haber cedido en las obras sociales el mes pasado. Y que luego la CGT encabece un paro. Sica dijo que no había argumentos para tal medida

 

El paro de la CGT más contundente contra la gestión de Mauricio Macri no generó reacción pública del mandatario. Pero su ministro de Producción y Trabajo, Dante Sica, tuvo que poner la cara por el Gobierno y cuestionó la medida: "tiene que ver con posiciones políticas de los sindicalistas, que están preocupados por el cierre de listas".

 

 

La medida gremial cayó mal en el oficialismo. Pero principalmente porque este año el Gobierno aceptó liberar $13 mil millones de fondos a las obras sociales sindicales que controla la Superintedencia de Servicios de Salud. "No podés arreglar por esa plata y que después te hagan un paro… Estuvo verde. No tiene llegada a la CGT", comentó uno de los popes del oficialismo a El Cronista.

 

 

Justamente, Sica ayer razonó que no había motivos para un paro. "Hace quince días la CGT había dicho que no había ninguna condición para hacer un paro. En ese lapso de tiempo no había cambiado nada del contexto, así que nos parece algo muy raro", planteó el ministro. Desde la cúpula de la Casa Rosada no opinaron al respecto del paro.

 

 

De hecho, el presidente Macri encabezó un discurso por el Día del Ejército y no hizo referencia a la medida de fuerza. El Gobierno recibe el reclamo de la CGT para que tome medidas inmediatas. Pero desde el oficialismo responden que "no hay nada nuevo" para ofrecer a los gremios.

 

 

Tras ceder en los fondos de las obras sociales, Macri está presionado para cuidar la billetera. En pleno programa de austeridad, el Gobierno se comprometió con un "déficit cero" ante el FMI que puede llegar a representar el 0,4% del PBI. La Casa Rosada todavía teme a nuevos terremotos en el mercado cambiario, así como se desayunó la última semana con una resolución de la Corte Suprema para que reconozca sumas no remunerativas en sueldos de las Fuerzas Armadas. "Eso puede repercutir en la administración pública y significar más de u$s 1.000 millones", comentó una fuente.

 

 

El paro de la CGT fue tildado de "político" y desde el Gobierno lo relacionaron  relacionado con las elecciones. En lo formal, los sindicatos argumentan que protestan por la crisis económica. En 2018, Argentina perdió 200 mil puestos de trabajo, el índice de desempleo subió de 8.4 a 9.1 y el salario cayó 8% en promedio. Todas estas estimaciones las cita el FMI en su última revisión de la economía nacional.

 

 

Ante la falta de respuestas económicas, el Gobierno plantea una disputa institucional con los gremios. "Estamos hartos de los paros. Ya sabemos que cuando el gobierno no es del partido de los sindicatos esto pasa. Es muy poco democrático este paro pero hay que bancársela", denunció la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich. El ministro del Interior, Rogelio Frigerio, también lo tildó de "político".

 

 

 

El Gobierno mantiene una tensión clara con el líder de los camioneros, Hugo Moyano. A tal punto, que el año pasado multó a su sindicato por más de $800 millones por no acatar una conciliación obligatoria y así cortó toda relación. En el medio, mantuvo una disputa por la empresa de correos OCA. "Dimos demasiadas peleas al mismo tiempo. Abrimos muchos frentes y no todos estamos en el mismo canal", comentaron en el oficialismo, en alusión a la relación con Moyano. Ahora, el líder de Camioneros está totalmente volcado a apoyar la fórmula de Cristina Fernández de Kirchner, cuando cuatro años atrás fue uno de los sostenes de la candidatura de Macri, en 2015.

Comentá la nota