El resultado electoral movió el amperímetro sindical y el sector de “Los Gordos” resolvió llevar a la reunión de Consejo Directivo del miércoles la posición de no movilizar a la CGT a la Plaza de Mayo el martes próximo. Aunque consideran que no fue un “triunfo abrumador” de Cambiemos en las PASO del domingo, sí contemplan que la sociedad se expresó en favor del presidente Mauricio Macri. Si hubiera habido un voto bronca contra el Gobierno, el cantar hubiera sido otro para avanzar en un plan de lucha. Ahora la CGT está en una encrucijada.

Así lo resolvieron dirigentes como los hermanos Daer, Héctor, quien además es triunviro cegetista, y Rodolfo; Francisco “Barba” Gutiérrez (UOM), Víctor Santa María (Porteros) y Armando Cavalieri (Comercio), entre otros. “De cara a la sociedad hacer esta marcha no tiene sentido”, confiaron a este diario sin titubeos.

¿Peligra la unidad? No se sabe lo que pueda pasar pero es cierto que la cuerda está tensa y se tensará aún más. También es verdad que el moyanismo siempre tiende a endurecerse para después, sí, sentarse a negociar.

Por ejemplo, cayó muy mal en los sectores no moyanistas que Pablo Moyano, en su rol de secretario gremial de la central obrera, haya convocado para el 17 de agosto a las delegaciones del interior para, supuestamente, debatir un plan de lucha. “No puede, no está facultado, sólo lo puede hacer el Consejo”, braman desde “Los Gordos”.

El triunviro y moyanista Juan Carlos Schmid viene expresándose públicamente a favor de endurecerse. Fue el único que afirmó ante los movimientos sociales que “la CGT convocará a un paro el día de la movilización” del 22. Hoy, optaron por el silencio ante los llamados de Clarín.

Sí hay que aclarar que hubo reunión del clan Moyano, de la que participaron tanto Hugo como Facundo junto a otros dirigentes de Camioneros para evaluar el resultado electoral y para hablar del “estado del peronismo”.

En esta oportunidad, como hecho curioso, quedaron a solas los independientes que suelen congeniar con “Los Gordos”. Este grupo está conformado por Gerardo Martínez (UOCRA), Andrés Rodríguez (UPCN) y José Luis Lingeri (Aguas). Por lo que sondeó este diario, no tendrían una postura tan radical como sus aliados y privilegiarían la unidad de la CGT conseguida el 22 de agosto de 2016. De hecho, planean armar algún tipo de encuentro informal con el sector moyanista en el día de hoy para no llegar este miércoles “a ciegas” a la reunión del Consejo Directivo.