La Justicia dispuso para el cram down (salvataje de la empresa por parte de un tercero) de Embotelladora Comahue “la apertura del registro en el expediente para que en el término de 5 días hábiles se inscriban los acreedores, la cooperativa de trabajo conformada por trabajadores de la misma empresa -incluida la cooperativa en formación- y otros terceros interesados en la adquisición de las acciones o cuotas representativas del capital social de la concursada a efectos de formular propuestas de acuerdo preventivo”, precisaron.

La información sobre la apertura del registro surge del decreto del 17 de abril de este año. Allí se ordenó la publicación de edictos por dos días en el Boletín Oficial de la provincia. La primera publicación se realizó el pasado lunes 20 de abril y la segunda hoy (jueves 3 de mayo). Es decir que el plazo de 5 días hábiles opera desde mañana viernes hasta el jueves 10 de mayo.

Hay gran expectativa en Cipolletti sobre todo este proceso judicial ya que la empresa es una de las más antiguas que tiene la ciudad y hay 84 trabajadores que todavía quieren mantener sus fuentes laborales y a quienes se les adeudan cuatro meses de salario, premios y aguinaldos.

Por parte de los empleados, mostraron un gran descontento tras la audiencia que se realizó ayer en Cipolletti, por la ausencia de Pablo García, el vicepresidente de la firma. “Mañana va a estar caliente”, deslizó uno de los trabajadores que por estas horas custodian la planta ante un posible “vaciamiento” y que adelantó que realizarán una asamblea y definirán posibles medidas de fuerza. La audiencia se había pasado para mañana, pero desde la empresa adelantaron que se encuentran en Buenos AIres por lo que no se presentarán.

Días atrás en un bar céntrico de Cipolletti, el gobernador Alberto Weretilneck mantuvo una reunión con el titular de la empresa, Néstor García, y su potencial comprador, Víctor Solmi, un empresario de la provincia de Buenos Aires que afirmó estar dispuesto a hacerse cargo del cram down.

Según trascendió, de esa conversación la empresa estaría en condiciones de continuar funcionando en caso de lograr el apoyo del gobierno provincial.

Cabe recordar que la firma quedó recientemente al borde de la quiebra, considerando los 300 millones que adeudan por aportes a la AFIP a lo que hay que sumarles otros 60 millones que se generaron tras el concurso que se inició hace unos años. Desde el gremio Sutiaga estimaron que el monto alcanzaría los 400 millones y aseguraron que no habría otro camino que la intervención.