La ocupación por algunos minutos del quinto piso del Palacio 6 de Julio por parte de un grupo de empleados municipales que intentaban impedir que las liquidaciones de sueldos que incluyeran descuentos por horas no trabajadas fue el capítulo que estrenó ayer al mediodía el Suoem en su disputa con Ramón Mestre por la creación del Ente de Servicios y Obras Públicas (Esop).

La movida sindical derivó en el envío de la Guardia de Infantería, que desde ayer custodia el sector en donde funciona Recursos Humanos.

La acción gremial, considerada como una “toma” por el Ejecutivo, hizo más lento aún el proceso de carga de descuentos en los sueldos que Mestre prometió para aquellos que cortaron las prestaciones de servicios.

“Aún estamos lejos de cargar los descuentos al total de las liquidaciones. Lo más probable es que no lleguemos al cien por ciento”, admitió anoche a este diario una alta fuente del Ejecutivo. La apuesta de la administración mestrista es avanzar “lo que más se pueda” durante la jornada de hoy.

Desde el gremio, en tanto, hablaron ayer de un “30 por ciento cargado” del total de las reparticiones.

Para colmo, los tiempos les juegan en contra a los funcionarios municipales: mañana los agentes estatales deberían recibir sus recibos de sueldo y el sábado tendrían sus salarios depositados. Los mestristas consideraban clave para el devenir del conflicto que los municipales percibieran en el bolsillo las quitas salariales.

En este marco de creciente tensión, este mediodía el Suoem realizará una nueva asamblea general, la quinta desde que se inició este pleito a principios de mes.

Desde las 9, el cuerpo de delegados y los municipales abandonarán sus áreas para movilizarse hasta la explanada de la Municipalidad, donde Rubén Daniele volverá a hablarle a sus representados. La protesta volverá a paralizar todos los servicios, y lo mismo se espera para mañana.

El impacto que tendrá en el conflicto el tenor de los descuentos a practicar tiene lecturas diferentes de ambos lados del mostrador.

En el mestrismo confían que funcionarán como un calmante para las protestas y aseguran que algunos estatales podrían recibir recortes de más de tres mil pesos. En cambio, en el Suoem evalúan que la quita será un combustible explosivo que aumentará la potencia del conflicto.

Sin salida a la vista

Si bien desde el Ejecutivo admitieron que hubo “contactos informales” en las últimas horas entre las partes en disputa, se mostraron pesimistas respecto de una pronta salida al conflicto. “Estamos hablando. Apostamos al diálogo, pero hasta aquí no pudimos avanzar”, contó el secretario de Gobierno, Javier Bee Sellares.

El Ejecutivo aceptó reducir el objeto del ente autárquico –que en principio podía encargarse de todas las obras y todos los servicios–, pero el gremio no moderó nunca su reclamo y, hasta ahora, sostiene que sólo depondrá su actitud si se deroga la ordenanza que creó el Esop.

Fin de semana de volanteada por la ciudad

300 mil panfletos. El Suoem continuará durante el fin de semana largo con su estrategia de hacer conocer a la ciudadanía los perjuicios que el sindicato considera que les ocasionará a la Municipalidad de Córdoba y a los vecinos la puesta en marcha del resistido Ente de Servicios y Obras Públicas (Esop) impulsado por el intendente Ramón Mestre. Para ello repartirá en los próximos días un total de “300 mil volantes”. Los puestos de entrega estarán ubicados en esquinas neurálgicas de la Capital y los centros comerciales. 

Sin piquetes ni cortes. El sindicato asegura que esas medidas de protesta no impedirán la circulación vehicular. En el seno de la conducción saben del descontento que hay entre los vecinos, y no quieren sumar otro factor de enojo.

Semana próxima. El jueves, el Suoem prevé una masiva presencia “de luto” en la reasunción de Ramón Mestre. Para el viernes anuncian una manifestación que sumaría a otros gremios.