Juan Grabois candidato, la carta de La Cámpora para acompañar a Máximo en 2019

Juan Grabois candidato, la carta de La Cámpora para acompañar a Máximo en 2019

El amigo del Papa vio a Cristina en diciembre, tras defenderla y decir que era víctima de persecución judicial.

Cristina Fernández de Kirchner tuvo un diciembre ajetreado, con muchas reuniones políticas entre su departamento y en el Instituto Patria, entre las que se destacó su reencuentro con Alberto Fernández, con quien había terminado peleada luego del conflicto con el campo de 2008.

Pero además de la cita con su ex funcionario -hoy comprometido con la quimera de juntar a todos los pedazos en que ha quedado roto el peronismo-, la senadora nacional de Unidad Ciudadana mantuvo el último diciembre una larga charla con Juan Grabois, el dirigente social amigo del Papa que conduce la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular.

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La CTEP forma parte del llamado “Tridente de San Cayetano” junto a Barrios de Pie y la Corriente Clasista y Combativa, dos organizaciones sociales críticas del gobierno de Mauricio Macri pero que también supieron protestar y cortar calles contra las gestiones presidenciales de los Kirchner.

Organizacione sociales antes de una reunión en Desarrollo Social. Foto Dyn

Grabois también es un duro contendiente del actual gobierno.En un reportaje con el diario kirchnerista Página/12 arrojó dos definiciones contundentes: una, cuando dijo “El vicio de Macri es la violencia”, al referirse a los casos Santiago Maldonado y Rafael Nahuel y también a la represión de las protestas, como sucedió con las marchas de diciembre contra la reforma previsional.

Pero en esa nota, además, Grabois salió en apoyo de la ex Presidenta al señalar que “la persecución a Cristina Fernández de Kirchner y a su familia, además de una inmoralidad, es un factor de desestabilización política”.

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Y sumó: “Cristina representa al 15, al 20 o al 25 por ciento, no sé, no importa, pero son muchos. No se la puede perseguir así. Lo mismo pensaría yo si el macrismo perdiera las elecciones y se desatara una cacería de brujas contra ex funcionarios de este gobierno”.

Así, Grabois despertó las sonrisas y algún que otro sueño en las filas kirchneristas. La charla con Cristina achicó distancias -y olvidó algunas críticas del joven abogado asesor del Papa a las gestiones cristinistas- pero alentó ideas que ya se debaten en el laboratorio de La Cámpora, la fuerza que conduce Máximo Carlos Kirchner.

En el Instituto Patria -y en las oficinas de la Cámara de Diputados donde el hijo de Cristina tiene su despacho de legislador nacional- ya piensan en el 2019. La próxima elección presidencial tendrá también definición de nuevos parlamentarios y entre los que finalizan mandato, está Máximo.

Por eso, algunos miembros de la conducción pretenden a Juan Grabois al frente de la lista de diputados por la provincia de Buenos Aires, seguido en la nómina por Máximo Kirchner,quien es legislador por ese distrito y no por Santa Cruz.

Papa Francisco con Emilio Pérsico y Juan Grabois, en mayo de 2014. Archivo Clarín

Grabois realiza actualmente una militancia social en la CTEP, más allá de que esa confederación se muestra cercana, en lo político, al Movimiento Evita, hoy distanciado del kirchnerismo y que compitió -sin fortuna- junto a Florencio Randazzo en la última elección parlamentaria de 2017.

La diputada Lucila De Ponti, del Mov. Evita,con Juan Grabois. Foto Clarín

Pero el nombre del asesor del Pontificio Consejo de Justicia y Paz -de estrecho vínculo con el Papa Francisco- genera atracción para la competencia interna con los demás sectores del peronismo, hoy desparramados y sin un liderazgo alternativo al de CFK. De todos modos, éste nunca se pronunció sobre su deseo de desempeñarse en una faena más política como sería una candidatura o desempeñar un rol parlamentario.

Un dato que alienta las coincidencias del kirchnerismo con Grabois es que se muestra activo, por estos días, en la participación de las organizaciones sociales en la marcha del 21F. Y en encuentros junto a Rafael Klejzer, titular de la CTEP Capital, prevén el movimiento de casi 100 mil militantes al acto donde el orador central será Hugo Moyano.

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Tanto Cristina como La Cámpora ven con mejores ojos estas acciones que las del PJ bonaerense, fuerza que adherirá a la marcha con sus principales dirigentes -como Gustavo Menéndez y Fernando Gray- pero que no movilizará micros ni columnas en apoyo a la movida moyanista. Y que mudó su reunión de conducción para el día 22, al día siguiente de la marcha camionera.

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En tanto, Cristina está instalada en la Ciudad de Buenos Aires, atenta al 21F pero sin mostrarse en fotos que la acerquen a Moyano, más allá de ordenar a los suyos “estar cerca de Hugo”. La ex Presidenta sí se muestra, en estos encuentros, preocupada por su suerte judicial y fundamentalmente, en cómo la Justicia puede avanzar sobre sus hijos Florencia y Máximo.

El caso de Florencia es el más acuciante para la actual senadora, ya que la joven de 27 años no tiene fueros, como su madre o como su hermano.

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