La venta de tierras públicas en la Ciudad es, nuevamente, noticia. En esta ocasión, el lugar de la 

discordia es un predio destinado para la construcción de viviendas sociales para los vecinos de la exvilla 31, el cual fue enajenado por decreto presidencial y pasará a manos privadas.

Vecinos del Barrio 31 “Carlos Mugica”, en Retiro, junto al Observatorio del Derecho a la Ciudad, denunciaron que el Gobierno nacional puso en venta el denominado predio “Flechabus”, que ocupa una superficie de 1,6 hectáreas. 

El principal reclamo de los habitantes está basado en que la comercialización de las tierras desconoce el dictamen de la Mesa de Gestión y Planeamiento Multidisciplinaria y Participativa para la Urbanización de las villas 31 y 31 bis, órgano creado por la ley 3.343 en el año 2009.

El “dictamen de la mesa”, tal como se conoce al proyecto de urbanización integral para el barrio, establecía que en el espacio donde la empresa de transporte tiene sus galpones se construirían viviendas y un centro comercial. Según el plan de hábitat, en ese dominio se emplazaría el “Barrio Inmigrante”, que albergaría a 400 unidades habitacionales.

Jonatan Baldiviezo, presidente del Observatorio del Derecho a la Ciudad (ODC), sostuvo que el Gobierno porteño nunca llevó a cabo el “dictamen de la mesa”. Y agregó que era un proyecto aprobado que “se tenía que empezar a cumplir y el Gobierno nunca lo cumplió”. 

En diálogo con Qué, el titular de la ONG reveló que “el Gobierno dice que ese dictamen necesitaba nueva aprobación legislativa, lo cual es una mentira, porque actualmente, los proyectos de urbanización que Larreta está llevando adelante en las (villas) 20, Chacarita y Rodrigo Bueno tienen el mismo procedimiento de discusión”. 

Amalia Aima, vecina del Barrio 31, aportó su mirada sobre el conflicto. “Pensamos que el Gobierno iba a respetar ese predio (FlechaBus) para la vivienda social. Porque la verdad es que las viviendas que están haciendo son muy escasas para la cantidad de la población que nosotros tenemos”, dijo. Aima, quien además es miembro de la Mesa de Participación para la Urbanización, confesó que “esto nos da mucha más desconfianza de que lo que están haciendo, realmente, sea para que nosotros podamos quedarnos a vivir acá y no sea un negocio inmobiliario”.

La diputada Andrea Conde (Unidad Ciudadana) sostuvo que el Gobierno de Larreta “se escuda en que es un predio nacional, lo cual es verdad. Cuando se hizo la ronda de Presupuesto, yo le pregunté al ministro qué pasaba con esos predios, y respondió: ‘Es de Nación, nosotros no tenemos nada que ver’”. Ante el futuro de la propiedad, la legisladora reveló que “lo que hace Nación es poner esos terrenos a la venta, y lo que los rumores dicen es que ya tiene arreglada la venta al grupo América (Daniel Vila - José Luis Manzano); aunque yo pregunté y oficialmente no me dijeron nada”. 

Baldiviezo admitió tener el mismo dato de los futuros compradores por los dichos vertidos por funcionarios de la Ciudad en una mesa técnica. 

En busca de la palabra oficial, Qué tomó contacto con personal de la Secretaría de Integración Social y Urbana, pero ningún responsable brindó información ni realizó declaraciones. A cargo de Diego Fernández, el organismo, dependiente de la Jefatura de Gabinete de la Ciudad, dice tener como objetivo la integración del Barrio 31 a la Ciudad. 

Según el ODC, el macrismo intentó implementar en el ámbito porteño distintos modelos de urbanización para que el mercado se haga de tierras públicas. Al fallar las tentativas, al Gobierno no le quedó otra que empezar a hacer una gran inversión en la urbanización de los barrios humildes. 

“Pero el espíritu genuino de ellos (el Pro) es buscar la forma de que estos grandes suelos de 

la Ciudad sean incorporados al mercado inmobiliario. Buscan que estas tierras, que no están en el mercado, salgan de la esfera pública y se las privatice (en este caso, a título de propiedad de los villeros), y de esa forma, luego el mercado presionará a futuro para hacerse de esos suelos”, advirtió Jonatan Baldiviezo. Y agregó que “son muchas las decisiones que van en esa línea y no en la línea de urbanizar los barrios, y que la integración sea permanente y duradera a futuro”.

En el mismo sentido, la diputada Conde sostuvo que el Gobierno “es predecible; cada vez que van a hacer algo que tiene que ver con las villas, los asentamientos y los barrios más humildes, atrás hay escondido un negocio. Y eso viene pasando en todos y cada uno de los lugares donde están interviniendo en la Ciudad con esta postura de integrar las villas y los barrios más pobres. Salen con eso y después, lo que aparecen son negocios, negocios y negocios”.

Amalia Aima reveló que “esto es una gran preocupación. No estamos en contra de las mejoras, por el contrario, queremos que todo lo que se haga, se haga pensando en 20, 30 o 40 años. Eso es lo que queremos: que nos den las respuestas y que se hagan más viviendas”. 

A modo de deseo, Aima expresó que “ojalá se pueda retroceder esto. Ojalá que no lo hayan vendido al predio, porque perjudica muchísimo a la urbanización”.

Por último, el letrado Baldiviezo afirmó que “el Gobierno de Larreta tiene un gran nivel de perversidad. Por un lado hacen toda una escenografía de participación y, en forma simultánea, otros organismos del Estado van mostrando cómo las decisiones ya fueron tomadas”.