Macri llama al diálogo para darle oxígeno al triunvirato en agonía

Macri llama al diálogo para darle oxígeno al triunvirato en agonía

La Casa Rosada aplica a la central obrera el mismo método que a la “liga” de Gobernadores del PJ: dejarla flotar en crisis y potenciar su acefalía.

La Casa Rosada salió ayer en bloque a impugnar la marcha de la CGT que llenó la Plaza de Mayo, pero preservó al fragmentado triunvirato de conducción de la central obrera. La fórmula aplicada por Mauricio Macri y Jorge Triaca fue atacar la movilización, a la que definieron "sin sentido", y preservar a la dirigencia gremial que se encuentra sumida en un cuadro de división, sin liderazgo político y en extrema debilidad para enfrentarse al Gobierno nacional.

La marcha de ayer fue la segunda movilización donde la CGT amaga con convocar a un paro pero se abstiene de definir el mecanismo de protesta. La primera vez había sido el 7 de marzo, cuando "las bases" desbordaron el acto, insultaron al triunvirato y hasta se robaron el atril. Ayer, Juan Carlos Schmid, Carlos Acuña y Héctor Daer -que se autoexcluyó del escenario- repitieron la metodología y anunciaron que recién se reunirán el 25 de septiembre para evaluar si fijan fecha de paro general. 

"Siempre hay diálogo. Veremos cómo se instrumenta...", explicó ayer Triaca a este diario ante la consulta sobre una eventual convocatoria al triunvirato antes del 25 de septiembre, día que se agendó para la reunión del comité confederal con potestad para decidir un paro. La Casa Rosada está pendiente del calendario electoral y aspira a evitar ruido gremial, y movilización en la calle, antes de las legislativas del 22 de octubre. La conducción colegiada, acéfala y sin organicidad, es lo mejor que le puede pasar al Gobierno nacional en su pulseada con los gremios. Después de las trompadas a dirigentes en la marcha del 7 de marzo ayer volvieron a producirse escaramuzas entre la facción de camioneros que no pasaron a mayores. En palabras de Néstor Kirchner, en Cambiemos claman "que florezcan mil flores" como la actual CGT. Más de la mitad del Consejo Directivo estuvo ayer ausente en el escenario de Plaza de Mayo -ver nota pág. 10-, ausencias que buscaron cubrirse con presencias piqueteras como Daniel Menéndez, de Barrios de Pie; Juan Carlos Alderete, de la Corriente Clasista y Combativa y hasta el legislador vaticano Gustavo Vera. La movilización del kirchnerismo a través de figuras como Jorge Taiana, compañero de fórmula de Cristina de Kirchner, y Axel Kicillof, terminó de redondear una puesta en escena ideal para la Casa Rosada. 

Hasta ahora, el Ministerio de Trabajo de Triaca aplicó la fórmula "uno a uno" para sellar la paz con los gremios. Suscribió acuerdos sectoriales sin darle la batuta política al triunvirato de la CGT en las negociaciones colectivas. La misma metodología aplica la Casa Rosada con los gobernadores de provincias, otra de las vigas estructurales del peronismo post-kirchnerista. Por ahora, no le da entidad a la presunta "Liga de Gobernadores" ni tiene previsto convocarlos a una reunión con Macri. El Ministerio del Interior de Rogelio Frigerio también aplica el "uno a uno" y deja que la "liga" flote en crisis, acéfala y anárquica de cara a 2019.

En las PASO, Juan Schiaretti perdió Córdoba ante Cambiemos. Juan Manuel Urtubey ganó Salta pero fue el único que se desmarcó de la presunta "liga" y rechazó la vía judicial para reclamar contra el Fondo del Conurbano de María Eugenia Vidal. El gobernador salteño se mueve sigilosamente: el viernes pasado encabezó un acto en provincia de Buenos Aires, en la ciudad de Dolores, para homenajear al General Martín M. de Güemes acompañado por el intendente local, Camilo Etchevarren. Ayer avanzó otro casillero y ubicó a Hernán Cornejo como vice del Paralsur en reemplazo del kirchnerista Jorge Taiana.

En Casa Rosada, Macri y Triaca sincronizaron la respuesta a la CGT. El Presidente consideró esta tarde que la movilización de la CGT fue "una pérdida de tiempo" que "no lleva a ningún lugar", al tiempo que subrayó que "el camino es dialogar". "Escuchar al otro, dialogar, entender, buscar soluciones en conjunto es lo que va a acelerar este proceso de crecimiento. Poner la energía ahí y no en movilizar a no sé qué, como hace algunas horas se veía. Es una pérdida de tiempo. No nos lleva a ningún lugar", sostuvo el mandatario luego de recibir a jóvenes que accedieron a su primer empleo. Triaca agregó además: "La movilización perdió sentido: tenía más que ver con algunas caras que vimos en la movilización (por los exfuncionarios y dirigentes kirchneristas) y con un proceso electoral", luego de un almuerzo con las 62 Organizaciones Peronistas que compartió con el titular de UATE, Ramón Ayala.

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