Los trabajadores de la Línea C realizan un paro por tiempo indeterminado porque las condiciones de seguridad no están garantizadas para trabajadores ni usuarios en la estación provisoria San Juan, que hará de terminal de la línea mientras duren las obras en Constitución. Según los metrodelegados, el andén provisorio de madera no soporta los 350 mil usuarios que lo transitan a diario, la catenaria de 1.500 voltios está al alcance de los pasajeros, no hay salidas suficientes –tampoco de emergencia- y los baños químicos para los trabajadores desbordan líquido en el andén.

“Metrovías intentó transformar la estación San Juan en una terminal provisoria pero no están dadas las condiciones de seguridad”, afirmó Cristián Palleti, delegado de la Línea C de la Asociación Gremial de Trabajadores del Subte y Premetro (AGTSyP). Esta mañana las Líneas D y E funcionan con demoras por problemas técnicos.

El metrodelegado enumeró las irregularidades que ponen en riesgo la seguridad de pasajeros y trabajadores: “Pusieron un andén de madera sin tratamiento ignífugo, hay una sola salida al exterior cuando en Constitución había ocho y no hay planes de evacuación ni salidas de emergencia. La única escalera mecánica, una antigua de madera, está clausurada por la Justicia porque murió una persona. El tendido de energía que alimenta el subte, la catenaria que transporta 1.500 voltios, está a 80 centímetros por arriba de las personas, alguien podría alcanzarla con levantar la mano. Es una locura que Metrovías ponga en funcionamiento una estación así que cumple con los requisitos de habilitación”, se quejó Palleti.

La estación Constitución estará cerrada durante todo enero y febrero por obras para cambiar los aparatos que realizan el cambio de vías de los trenes. Mientras tanto, las estaciones San Juan e Independencia funcionarán como cabeceras provisorias.

“Se montó un servicio reducido, precario y con menos formaciones, que deben ampliar la frecuencia para satisfacer el mismo servicio. A esto se suma que cerraron el taller San José donde se realiza el mantenimiento a las formaciones y lo trasladaron a una vieja usina en la estación San Martín que tiene 90 años y no está en condiciones operativas”, sostuvo el delegado y agregó: “Hace tres días que las formaciones no tienen mantenimiento, cuando debería ser a diario en coches con 50 años de antigüedad. El subte está en una crisis de seguridad, hace meses lo venimos dicendo”.

Los metrodelegados también señalaron que la estación provisoria no cumple con sus derechos laborales ya que los baños químicos que se instalaron en el andén “desbordan líquido con olor nauseabundo” y que el cuarto de descanso no cumple con las medidas para que pueda ser usado por cuarenta trabajadores por turno.

Desde Metrovías dijeron en un comunicado que la medida de los trabajadores es “incomprensible”, “injustificada y sorpresiva” ya que los trabajos en la estación Constitución fueron informados “con más de un mes de anticipación a la representación gremial”. “Las condiciones de trabajo son provisorias y las venimos conversando con los trabajadores hace dos meses”, dijeron a Página/12 voceros de la empresa y aseguraron que la capacidad de la estación San Juan fue tenida en cuenta y por eso tomaron la decisión de partir el tramo y hacer dos cabeceras provisorias, en referencia a la estación Independencia.

Para el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, la medida de los trabajadores también es “injustificada”. "Ya los hemos escuchado denunciar cualquier cosa, todo el tiempo. La obra estaba anunciada hace meses y de un día para otro empiezan a aparecer estos reclamos", dijo en declaraciones a radio La Red. Según Rodríguez Larreta, la línea C es “la única línea donde tuvimos paro el año pasado fue en la C, salvo un día de paro por una persona que falleció en otra. Pareciera que es en la única donde hay problemas, obviamente hay algo que excede a lo laboral", sostuvo.

"No queríamos llegar a esto (en referencia al paro), pero nos tratan como animales y así no se puede trabajar. La estación San Juan no está en condiciones de ser cabecera, las mujeres tienen que ir a un baño químico, ni siquiera agua tenemos", explicó el secretario adjunto de la Asociación Gremial de Trabajadores del Subte y Premetro (AGTSyP), Néstor Segovia. También pidió "perdón a los pasajeros", aunque dejó "en claro que si no hay servicio es por culpa de Metrovías que no pone las condiciones mínimas de trabajo".

"Queremos trabajar lo que hay que trabajar pero en las condiciones que correspondan" aseguró Segovia y agregó: "Esto ya no depende de nosotros, nosotros somos los más débiles."