Los dos excluidos de la mesa política de Cambiemos durante la gestión de Mauricio Macri se pusieron rápidamente a trabajar. Se trata de una propuesta que, en algunos aspectos, recuerda a la fallida experiencia de Alternativa Federal: una opción de centro, antigrieta, que consiga atraer a los descontentos con el Frente de Todos y de Juntos por el Cambio.

Mauricio Macri ayuda, y mucho, con sus actitudes, a la fractura de la coalición. Hace horas lo salvó el gong, cuando iba a exigir que le reconocieran su jefatura en la reunión pautada entre las autoridades del espacio y finalmente se decidió participar de la contramarcha por la prisión de Milagro Sala. No estaba muy en claro qué le contestarían.

La radicalización de la grieta que plantea el oposicionismo sistemático de los sectores más duros de Juntos por el Cambio molesta a muchos integrantes de la coalición. Además notan que esta estrategia les impide estrechar vínculos con los aliados provinciales circunstanciales del Frente de Todos, que ya han manifestado su voluntad de abandonar su alineamiento con el gobierno de Alberto Fernández si no se les cumplen los acuerdos cerrados.

Monzó tiene sus propios diputados en la provincia de Buenos Aires, y tanto él como Frigerio cuentan con aceitadas relaciones políticas en todo el país. También saben que hay muchos legisladores nacionales y provinciales dispuestos a partirse de Juntos por el Cambio para generar una opción presidencial antigrieta para 2023. Pero irían funcionando como bloque desde mucho antes.

El candidato natural de ese espacio sería Horacio Rodríguez Larreta. Tiene gestión reconocida, diálogo con todos y una abundante caja. Además, su capacidad política excede largamente a las de De La Rúa y de Mauricio Macri, los dos jefes de gobierno que procedieron de la CABA. Y, otro dato no menor, está en el momento más alto de su carrera política.

El martes Monzó y Frigerio se reunieron con el intendente de Rosario, Pablo Javkin. La coalición entre socialistas, radicales y peronistas sería la clave del nuevo espacio. Y hasta se ensayó un nombre provisional para la coalición que se intenta implementar: “Alternativa del medio”.

La reunión en el bar Sounderland del Puerto Rosarino dejó conformes y esperanzados a todos los participantes. A pesar de las incontables denuncias contra su gestión, Rodríguez Larreta suma y sigue.