La mamá de la mujer dijo que De Bonis está muy asustada: "No puedo contar nada. La policía lo está manejando. Ellos están haciendo las investigaciones", dijo la docente. En tanto, la investigación policial apunta hacia al menos dos grupos de narcomenudeo situados cerca del Centro de Educación Complementaria N°801, donde trabaja la víctima.

Este centro donde funcionaba un comedor esta situado a pocas cuadras de la escuela N° 49, que explotó en agosto último y causó la muerte de dos víctimas. En la comisaría 7a de Moreno se trabaja para determinar si delincuentes vinculados a la compra y venta de estupefacientes estuvieron detrás del feroz ataque. El fiscal general de Moreno y General Rodríguez Lucas Oyhenarte supervisa la investigación, que recayó en la UFI N° 5 de ese departamento judicial.

 El gobierno de María Eugenia Vidal sigue con máxima preocupación el desarrollo de la investigación. Vidal fue contundente al solidarizarse con la docente secuestrada, golpeada y amenazada de muerte: "Se cruzó una raya", dijo la mandataria.

En la Casa de Gobierno consideran al intendente de Moreno, Mariano Festa, aliado a Unidad Ciudadana, un cacique de la vieja guardia peronista, incapaz de controlar a su tropa más pesada. Pero aun así no se le adjudica la trama intelectual del ataque a los docentes, claramente enfrentados en sus reclamos por mejoras edilicias con el gobierno de Cambiemos.

En cambio, el gobierno de Vidal sospecha que detrás de este ataque, al igual que de los intentos violentos de robo en supermercados la semana pasada, hay grupos de narcos arraigados en el conurbano que pueden verse beneficiados por una escena de caos que obligue a la policía a distraerse de sus tareas habituales de lucha contra el narcotráfico.