Sólo alterará sus planes algún gesto de rebeldía de Daniel Scioli. Hugo Moyano apuesta al quiebre de la relación entre el gobernador de Buenos Aires y la Casa Rosada, pero mientras tanto avanza decidido en el armado de un polo peronista opositor. La confirmación de esta iniciativa fue escenificada en el homenaje a Rucci, el martes pasado, con una protesta en los tribunales.

Tras el abierto desafío de Moyano a derrotar al Gobierno en las urnas, se dispararon versiones sobre los hipotéticos nombres para encabezar la lista de candidatos en 2013. Los cargos legislativos no le entusiasman al camionero. Lo reconoce cada vez que evoca su paso como diputado bonaerense entre 1987 y 1991.

Sin embargo, Moyano evalúa un giro y ahora no descarta postularse a legislador nacional. Podría tratarse de una candidatura testimonial. En su entorno, no lo afirman ni lo rechazan. Lo conversan y lo estudian, tanto como la posible candidatura de su hijo Facundo, cuyo mandato como diputado nacional estará en vigencia hasta diciembre de 2015.

Lo que ya es un hecho es que Moyano apuntará a fortalecer el bloque de diputados nacionales provenientes del sindicalismo. Anhela con que su ladero Omar Plaini pueda renovar su banca en la Cámara baja y conseguir tres o cuatro lugares más.

El entusiasmo de fundar un espacio propio se mantiene vigente. A dos años de su nacimiento, la Corriente Nacional del Sindicalismo Peronista quedó algo archivada. En el moyanismo, analizan la posibilidad de hacerse cargo de un sello partidario en cinco provincias y así estar habilitados por la ley electoral para conformar un frente nacional, con candidatos propios. A este proyecto le falta tiempo de maduración. El flamante partido FE, de Gerónimo Venegas, podría servir como salida.

En su afán por sumar aliados, Moyano tuvo gestos de apoyo con los gobernadores que se enfrentaron a Cristina Kirchner. "Se tienen que callar la boca porque tienen miedo que les cierren el grifo y no puedan pagar salarios. Nosotros estamos acostumbrados a la pelea", dijo.

En los tribunales, Moyano escenificó su alianza con el gobernador de Córdoba, José Manuel de la Sota, y con el senador por San Luis Adolfo Rodríguez Saá. Se supo, además, que mantuvo contactos con el santacruceño Daniel Peralta, a quien ya había apoyado cuando desde el kirchnerismo se lo acusó de espiar a la Presidenta. Anhela Moyano con que todos ellos puedan unirse.

El camionero ya advirtió que respaldaría en 2015 a Scioli en una hipotética candidatura presidencial. Pero Moyano también empuja a Scioli y a De la Sota a refundar el PJ.

Sin definiciones en cuanto a las candidaturas, la CGT del camionero presentó el miércoles su plataforma política, con 21 lineamientos. "Es una suerte de plan de gobierno para sentarse con los partidos y plantearles nuestra visión", dijo un moyanista.

Son propuestas inspiradas en las ideas que usaba Saúl Ubaldini para embestir contra Raúl Alfonsín en los 80. Incluye definiciones sobre educación, derechos laborales, reforma financiera e impositiva, y un análisis sobre la matriz productiva e inversiones estratégicas..