Un día antes del encuentro de la CGT en Azopardo, tendrá instancia decisiva el conflicto paritario de la Asociación Bancaria (AB) que lidera el radical Sergio Palazzo. Será el miércoles cuando en el ministerio de Trabajo se reúna ese gremio con las cámaras empresarias, por un acuerdo que ya firmó el Banco Credicoop, solidario con la AB.

La pretensión sindical consagra una suma fija de $2.000 pesos y un aumento salarial del 10%. Los bancos se quejan que deberían abonar entonces el 20%, además de otros benificios logrados por la AB como la participación en Ganancias, logro histórico. La banca especializada (ABE) y la extranjera (ABA) se resisten a firmar el acuerdo, menos belicosas Adeba y Abapra no plantearon resistencia en su momento y están a la expectativa.

El sindicato de Palazzo denunció a la opinión

pública un escenario similar al de 2001

La no homologación del acuerdo por parte de la cartera laboral a cargo de Jorge Triaca, desató la furia bancaria. En un severo comunicado, además de calificar sin metáforas al Gobierno y a las entidades, remarcaron que el “publico en general” debe tomar conciencia que el Ejecutivo puede disponer a criterio de los depósitos efectuados en dólares, recordando 2001.

La Bancaria, que lidera junto a Gráficos y docentes privados la Corriente Federal de los Trabajadores (CFT) acusó a Triaca de “operar y favorecer a la banca en desmedro de los trabajadores” y lo responsabilizó por la reacción que pueda tener la no homologación del acuerdo paritario del sector.