En medio de una nueva huelga provincial, el gremio ATE se manifestará en los puentes carreteros con la posibilidad latente de que se corte el tránsito vehicular. El sindicato más beligerante de la provincia completará hoy el segundo día de paro en reclamo del cobro de un bono de fin de año que el Gobierno ya descartó pagar.

La protesta se sintió ayer en las oficinas de Rentas de las principales ciudades de la provincia, con una importante concentración en Roca. Según datos de la organización, la adhesión a la huelga rondó el 80 por ciento. Hoy la incidencia sería mayor, ya que la marcha hacia las ex cabinas del peaje provocará complicaciones al intenso tránsito valletano. La movilización fue convocada a partir de las 10 y contará con la participación a afiliados de la CTA y docentes.

“La alta adhesión en el primer día de medidas muestra por sí sola la justicia del reclamo. No es un capricho, es una necesidad extrema de los trabajadores que ven cómo día a día pierden todo el poder adquisitivo de sus ingresos”, manifestó Rodolfo Aguiar, secretario general de la Asociación Trabajadores del Estado.

El gremio pide un “bono de fin de año de $4.000 pesos” que permita compensar la inflación, el pase a planta permanente de más de 5.000 trabajadores y que se instrumente el inmediato blanqueo de los salarios. El gobernador Alberto Weretilneck ya rechazó la solicitud, explicando que el Ejecutivo no tiene los fondos para pagar un doble aguinaldo. Aseguró que el planteo “es entendible” por el efecto de la inflación, pero resaltó que durante el año “se hicieron esfuerzos” para recomponer la situación salarial.