Para la UDA “esto es una mentira”

Para la UDA “esto es una mentira”

Desde el riñón del consejo directivo de la CGT, el gremio que tiene a su cargo la secretaría educativa, la Unión Docentes Argentinos (UDA) definió al adicional que anunció ayer el Gobierno Nacional “como el bono de la mentira”.

 

Instalado en una férrea pulseada con el ministro de Educación, Esteban Bullirch, por la reapertura de paritarias para los maestros y profesores, la organización que encabeza el santafesino Sergio Romero emitió un comunicado, horas después del encuentro de la Casa Rosada donde consignó una severa crítica.

“Este es el bono de la mentira porque lo paga el que puede y como puede, ya que nadie está obligado. Además, no será cobrado por ningún empleado de la administración pública, entre ellos los docentes, muchos de los cuales se encuentran hoy por debajo de la línea de pobreza”, señaló.

Con representación federal y destacando en su estructura la “interacción” de los referentes provinciales en la toma de decisiones la UDA consideró también que “este Gobierno, que no manifiesta sensibilidad antes las necesidades de los trabajadores, hace dos meses que nos viene entreteniendo con esto del bono en vez de discutir salarios en los ámbitos correspondientes, como son las paritarias, ignorando la autonomía de las negociaciones colectivas”, a la vez que agregaron: “por lo tanto, nos manifestamos en defensa de la autonomía colectiva de nuestra organización y propugnamos la inmediata reapertura de la negociación colectiva para el sector docente”.

Por otra parte, señalaron que “con el pago de estos bonos se están convalidando el pago de sumas en negro dentro del salario, cuando en realidad el Estado debería ser propulsor de que todo lo que integra el salario sean sumas remunerativas y bonificables”.

Sin lugar a casualidades, el aval del clero estuvo presente en la reflexión del gremio, en sintonía cegetista ya que la UDA destacó el acompañamiento de la Iglesia: “podría influir en alejar espíritus del gobierno que promueven el desempleo y bajos salarios. Una especie de vade retro a políticas de pobreza

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