El paro general convocado ayer por la CGT a nivel local tuvo un fuerte acatamiento en el sector industrial y de servicios. 

El acatamiento del sector comercial prácticamente fue nulo, lo cual puede tomarse como el dato relevante del paro en nuestra ciudad.

Fue vital la adhesión de sectores estratégicos como Unión Tranviario Automotor (UTA), Unión Obrera Metalúrgica (UOM), Luz y Fuerza, UOCRA, docentes, bancarios, portuarios, municipales y judiciales, entre otros. 

También las estaciones de servicio, profesionales médicos, trabajadores de la sanidad y canillitas se plegaron a la medida, resintiendo fuertemente la actividad en cada uno de esos sectores.

La ciudad amaneció muy sucia debido a dos cuestiones: la adhesión de los camioneros y el poco apego a la buena conducta de muchos vecinos que sacaron a la calle la basura a pesar de que se anunció en reiteradas ocasiones que no debían hacerlo.

“El paro fue importante y la situación que expresa el éxito de la convocatoria es que pareció una jornada de domingo en lugar de jueves”, señaló Luis Herrera, titular de la CGT San Nicolás-Ramallo, sobre el acatamiento en nuestra ciudad.

“La adhesión fue muy alta en todo el país. Ahora esperamos que el gobierno escuche y actúe en consecuencia, así no serán necesarias más medidas de fuerza. Lo que hay que hacer es corregir el rumbo que tanto daño le hace al trabajador”, añadió.

Unos sí, otros no

Un panorama híbrido se pudo observar en el sector de taxis y remises. 

Al no haber transporte público de pasajeros, muchos remiseros y taxistas optaron por salir a trabajar para aprovechar esa mayor demanda, mientras que otros decidieron plegarse a la medida de fuerza.

“Los remiseros vivimos con lo justo. Por eso se entiende que muchos salieran a trabajar como cualquier otro día”, indicó Pato Bottazzi, referente de los remiseros. 

Sorprendió que hubiera taxistas trabajando puesto que el gremio que los representa fue uno de los más fervientes convocantes al paro.