Tal como estaba previsto, ayer se realizó en todo el país el paro nacional de la CGT y la CTA, las dos centrales obreras de la Argentina, que tuvo su eco en la provincia de Santa Cruz tanto en la actividad pública como en la faz privada.

De hecho, en el Estado, con mayor injerencia de la Central de Trabajadores de la Argentina (CTA), la medida se sintió fuerte en hospitales, escuelas y distintas dependencias, sobre todo aquellas en las que tiene preponderancia el gremio ATE.   

En cuanto al sector privado, los petroleros fueron parte del reclamo al gobierno de Mauricio Macri, puntualmente por las situaciones de despidos en ese sector; la UOCRA fue otro sindicato que ayer incluso se movilizó en esta ciudad capital.

El transporte- Si hablamos de presencia en las calles y rutas de la provincia, uno de los gremios que ayer se apostó sobre la autovía 17 de Octubre, a la altura de la Av. Ricardo Balbín, fue el de los Camioneros. Los trabajadores cortaron por un lapso la calzada y después dejaron pasar el tránsito particular. Misma medida llevaron adelante en la Ruta Nacional N°3, camino hacia Chile.

El personal de la Unión Tranviarios Automotor (UTA), por su parte, desplegó afiliados en la terminal de ómnibus de Río Gallegos, de donde parte el transporte, tanto de media como de larga distancia.

Unas horas antes, el secretario general de la Unión Tranviarios Automotor (UTA) Santa Cruz, Rubén Aguilera, había asegurado que no se cortarían las rutas hacia el parque nacional ni hacia Río Gallegos durante la jornada de paro prevista para ayer, jueves.

En otras localidades, como en Río Turbio, Franco Paz, periodista de Radio Nacional, indicó en comunicación con Tiempo FM que allí había paro de bancarios, Luz y Fuerza, ATE, SPSE, SOEM y Correo Argentino. En tanto, la sesión en el Concejo Deliberante de aquella ciudad se realizó de forma normal y no como en esta capital, que fue suspendida.