En una entrevista publicada en La Nación, el jefe de Gabinete consideró importante que, de cara a las elecciones, se dé un debate “más transparente, abierto, diverso y profundo”. “En eso asumimos una autocrítica de tratar de desalentar cualquier mensaje negativo hacia el otro. Queremos una campaña de propuestas”, agregó.

Por su parte, el asesor ecuatoriano que se fue del país luego del “palazo” -según palabras del propio Macri- recibido en las PASO, volvió con un tono módico para resaltar la necesidad de diálogo entre Macri y Alberto Fernández. “Si pensamos en una Argentina que se proyecte hacia el futuro, es indispensable que, pasadas las elecciones y gane quien gane, Macri y Fernández conversen y trabajen juntos por el futuro del país, tanto en la política interna como en el ámbito internacional”, consignó el consultor en diario Perfil.

“Mi insistencia sobre la vigencia del kirchnerismo fue interpretada por algunos como un deseo de polarizar con Cristina para que Mauricio Macri ganara las elecciones. Eso nunca fue así”, agregó JDB.

Las definiciones de los dos principales estrategas de Juntos por el Cambio van en línea con las del candidato a vicepresidente Miguel Ángel Pichetto, quien aseguró que no hay transición entre las PASO y el 27 de octubre, sino un período en el que la campaña se vuelca a la presentación de las propuestas concretas de cara al futuro.