“Hay una estrategia deliberada de estirar el conflicto, de bajarnos el salario”. Apenas iniciada la entrevista en la redacción de Letra P, el titular del Suteba, Roberto Baradel, no duda en marcar la razón por la cual el gobierno de María Eugenia Vidal hace más de dos meses que no convoca a la mesa paritaria a los representantes del Frente de Unidad Docente Bonaerense (FUDB): “La estrategia es tratar de esquivar el llamado porque cada convocatoria que hacen se desgastan, porque queda claro a la luz de la sociedad que nos quieren bajar el salario”.

Al considerar que el 25% de aumento logrado por Camioneros no sólo “es un triunfo para Moyano” sino “también para los trabajadores”, Baradel no desestimó ese porcentaje para la discusión salarial docente: “Si la propuesta es del 25% con cláusula gatillo, lo pondremos a consideración”, señala, aunque antes de dejar en claro que el planteo de los educadores pasará por un 30% sin resignar la cláusula de actualización automática. Pero, intuyendo que la próxima oferta de Vidal “no va a ser lo que queremos”, abre la posibilidad a una medida de fuerza para el reinicio del ciclo lectivo post receso invernal, no sólo por el aspecto salarial, sino por conflictos recientes como “el ajuste que está aplicando el Gobierno con los Equipos de Orientación Escolar”.

Haciendo foco en la unidad como factor necesario para oponerse a las políticas del Gobierno, el dirigente sindical aseveró que la imagen de Vidal “ya no está blindada” y que fue la misma gobernadora la que rompió ese blindaje “con la gestión desastrosa que está haciendo en la provincia”, a la vez que dedicó un párrafo especial al ministro de Educación de la Nación, Alejandro Finocchiaro, sobre quien cuestiona su “lenguaje bélico”, lo asemeja a “un puntero de barrio” y afirma que “su preocupación más grande es ser intendente de La Matanza, algo que está años luz de poder hacerlo”.

¿La próxima convocatoria no resiste propuestas similares a las que se hicieron en los anteriores encuentros paritarios?

-Otro 15% no resiste de ninguna manera. Pero intuyo que no va a ser lo que nosotros queremos. Vamos a plantear el 30% con cláusula gatillo. Por supuesto que, si hubiera una contrapropuesta que fuera razonable, la someteríamos a consideración de las asambleas.

-¿Qué sería razonable?

-Creo que la inflación va a estar entre el 25 y el 30%. Pero tiene que ser una propuesta razonable, un porcentaje serio, más cláusula gatillo. Si no está eso, no podemos, tendríamos que estar reclamando el 35, el 40% para cubrirnos por las dudas. Así que la razonabilidad tiene que ver con el porcentaje más la cláusula de actualización automática. Si la propuesta es del 25% con cláusula gatillo, la pondremos a consideración.

"Si no hubiera una propuesta concreta, sería difícil el reinicio de las clases después de las vacaciones de invierno."

-Y si no hubiera una propuesta razonable, ¿estaría en peligro el reinicio del ciclo lectivo tras el receso de invierno?

-Sí, si no hubiera una propuesta concreta, sería difícil el reinicio de las clases después de las vacaciones de invierno. Pero no solamente por la falta de convocatoria paritaria, sino por el ajuste que está aplicando el Gobierno con los Equipos de Orientación Escolar (EOE). Los EOE son equipos interdisciplinarios que tienen las escuelas y que trabajan en diferentes problemáticas, por ejemplo orientadores sociales que van a las casas de los chicos o llaman a las familias cuando los chicos no van, que tienen problemáticas sociales complejas, orientadores educacionales que trabajan con el problema de aprendizaje de los chicos, que son psicopedagogos o licenciados en Ciencias de la Educación, o hay fonoaudiólogos que detectan diferentes afecciones o en algunos casos hay psicólogos, médicos y problemática familiar.

El 50% de las escuelas tiene estos equipos, el otro 50 no lo tiene. El Gobierno, para el 50 que le falta, le saca a las escuelas que tienen y lo distribuye en toda la provincia, una barbaridad. Ajuste puro y duro. Por eso queremos que se derogue la resolución.

-Se presentó un proyecto para eso…

-Un proyecto muy interesante que busca anular esta resolución y generar los equipos en el 50% de escuelas que faltan. Un proyecto del FIT que unificaron con Unidad Ciudadana, con el Frente Renovador y con los otros bloques del peronismo.

-Hay ejemplos como éste en el que el arco opositor se une para plantear su rechazo. También ustedes, como gremios, se unieron el año pasado, Frente Gremial y Udocba, y conformaron el Frente de Unidad. ¿Cree que el Gobierno está llevando a eso y el año que viene se pueda materializar en una oferta electoral conjunta para competir contra el oficialismo?

-Lo único que ha hecho bueno este gobierno con los trabajadores es generar las condiciones para que construyamos unidad, que nos unamos (risas). Es así. Con Udocba, tuvimos durante años un contrapunto muy fuerte, se podría decir enfrentamientos muy fuertes. Cuando el ballotage lo ganó Macri, a la semana lo llamé a Miguel Díaz y le dije ‘mirá, creo que viene otra etapa en este país, tenemos que sentarnos a discutir, ver las diferencias que tengamos, pero tenemos que tratar de estar juntos y unificar. Y creo que fue una decisión correcta.

-¿Ve en un futuro cercano a las CTA dentro de la CGT?

-Con una sola condición: que se ponga al frente de la lucha en defensa de los derechos. Ésa es la condición nuestra. O sea, que tiene que haber una central, llámese CGT o de otra manera, que represente cabalmente a los trabajadores.

-¿Actualmente lo está haciendo el triunvirato?

-No quiero meterme en la interna de la CGT, pero nosotros precisamente estamos en la CTA porque creemos que no se dan las respuestas necesarias. Sí fue bueno lo del 25, porque en eso ponderamos y saludamos la decisión de la CGT de convocar al 25, pero tenemos que estar todos a la altura de las circunstancias. Perón decía de los dirigentes sindicales, una de las cuestiones que hay que resaltar es la prudencia, ‘pero estos muchachos son muy prudentes’, decía por otros sindicalistas. Una cosa es ser prudente y otra es no salir a levantar la voz cuando hay que levantarla. Pero no es una crítica directa- Apostamos a la unidad. Todos tenemos que estar a la altura de las circunstancias.

-¿Vidal está blindada?

-Ya no. Sí por algunos medios, pero es tan dura la realidad que no pueden esconder cuestiones. Por ejemplo, me llamó poderosamente la atención una nota de Clarín donde, no sé si se les escapó o no leyeron la nota del periodista y se les filtró, donde describieron una situación en una escuela de Vidal con Macri, cómo se tenía que ir por los reclamos que le estaban haciendo los docentes y que un colaborador suyo le dice: ‘Antes esto no nos pasaba, ahora nos putean’. Así lo había puesto Clarín. Me llamó poderosamente la atención, pero hasta eso lo reflejan. Nosotros creemos que no es la forma, hay que reclamar, hay que protestar con respeto, pero hay una indignación muy grande con María Eugenia Vidal. Y, si ven las encuestas, ya le está dando valores negativos a su gestión, encuestas encargadas por ellos también. Así que el blindaje lo rompió la misma gobernadora con la gestión desastrosa que está haciendo en la provincia.

-¿Existen diferencias entre Finocchiaro y Sánchez Zinny?

-Creo que ideológicamente están en la misma sintonía en términos de proyecto. Finocchiaro era el mismo en la Dirección General de Cultura y Educación de la provincia y ahora en el Ministerio de Educación de la Nación. El problema es que –el año pasado- creo que tuvieron la estrategia de hacer jugar a la gobernadora para enfrentarnos a nosotros y entonces se escondía un poquito más, no salía tanto y recaía más en la gobernadora, a quien ponían en contrapunto conmigo. Querían demonizarme desde muchos lugares.

Y en el Ministerio de Educación se dio cuenta de que se tuvo que hacer cargo él. Y lamentablemente utiliza un lenguaje bélico que no está a la altura de un ministro de Educación. Un ministro de Educación tiene que ser razonable, reflexivo, crítico, no excederse, y él permanentemente actúa más como un puntero de barrio. Quizás haya muchos punteros de barrio mucho mejores que él. No está a la altura de ser ministro de Educación.

Creo que la preocupación más grande de él es ser intendente de La Matanza, aunque está años luz de poder hacerlo. ¿Qué le va a ofrecer a los vecinos de La Matanza? Ya lo que les puede ofrecer se los está ofreciendo: más hambre, desocupación cierre de fábricas, de comercios. ¿Qué le va a ofrecer Finocchiaro?