La ciudad de Córdoba vivió ayer buena parte de la jornada en estado de movilización gremial y conflictividad ciudadana por los diversos inconvenientes que produjeron en el casco céntrico, fundamentalmente en el tránsito, marchas y actos de trabajadores públicos, tanto de la repartición provincial como de la municipal.

A los reclamos matutinos del Sindicato de Luz y Fuerza, que se quejó por el Impuesto a las Ganancias, y del Suoem, con pedidos de efectivización de personal en el Palacio 6 de Julio, por la tarde completó el panorama una movilización del Sindicato de Empleados Públicos (SEP).

“Esto (por la manifestación) no es un capricho tonto de un dirigente mesiánico. Los que reclaman son hombres de carne y hueso que hace entre cinco y ocho años que están esperando lo que la ley establece tan simplemente: pasaron seis meses de contrato, a planta”, aseguró ante agentes contratados el titular del SEP, el legislador oficialista José Pihen.

El gremialista recibió frente al edificio de la Legislatura provincial, antes del inicio de la sesión, a una numerosa columna de trabajadores estatales que minutos antes había partido desde la sede del sindicato.

Tras recordar la “promesa incumplida” del Gobierno, de llamar a concurso para 1.500 cargos antes de fin de año pasado y repasar otras dilaciones similares, Pihen pidió a sus representados “festejar” la convocatoria a concursos que realizó la administración provincial el martes y que fue publicada en el Boletín Oficial .

“Somos conscientes de que es sólo una parte. Estas reivindicaciones son permanentes. Ha hecho falta el esfuerzo de todos ustedes para llegar a los 1.500”, reforzó el sindicalista.

Más adelante, Pihen dijo “no” tenerles “miedo a los concursos”. Y puntualizó: “Primero, el problema era que había que hacer concurso; dijimos que sí, se sancionó la ley, pero nunca llamaron a concursos”.

En el tramo más duro de su discurso contra la administración de cuyo partido forma parte, Pihen señaló: “Tenemos que andar penando para que pongan la gente que hace falta, y cuando lo hacen siempre es en condiciones precarias. En todas las áreas de la administración sucede lo mismo”.

Consultado por La Voz del Interior sobre su condición de oficialista y, a la vez, líder de la protesta en contra de la administración delasotista, Pihen señaló: “Estoy acá con un compromiso que está por encima de todo. Fui elegido para representar los intereses del gremio y luchar contra la precarización”.

De acuerdo a las estimaciones del SEP, serían “ocho mil” los agentes públicos, entre contratados, becarios, pasantes, auxiliares y monotributistas, los que se desempeñan por fuera de la legislación laboral vigente.

Ley “compensatoria”

Según adelantó el titular del SEP, desde hoy se recolectarán firmas entre los estatales con el objetivo de ejercer presión en la Legislatura para tratar un proyecto ingresado por Pihen, pero que aún no cuenta con el aval del Ejecutivo.

La iniciativa plantea la necesidad de encontrar una fórmula para “compensar económicamente” a aquellos agentes estatales que están en situación precaria.

El texto en cuestión se encuentra en análisis en el Centro Cívico, pero no será impulsado hasta después de las elecciones provinciales.