Sin apelar a la indulgencia con la que los funcionarios nacionales y provinciales suelen referirse públicamente a la gestión del intendente Carlos Arroyo, el Organismo Provincial para el Desarrollo Sustentable (OPDS) describió los múltiples desaciertos cometidos por el municipio, que llevaron a que durante los últimos meses el predio de disposición final de residuos ingresara en una situación de emergencia.

Luego de destacar el esfuerzo realizado por la comuna en el pasado para inaugurar un establecimiento modelo, que en el año 2013 presentaba “una vida útil remanente de 20 años”, el organismo lamentó que “por la falta de continuidad de las obras de infraestructura necesarias, desde el año pasado” la vida útil del predio quedara reducida a apenas “2 meses”, generando la necesidad de realizar obras millonarias para evitar una situación de colapso.

Esa apreciación, que ya había sido formulada en el mes de noviembre, fue reiterada en un informe que el OPDS elaboró hace algunas semanas, luego de que el 8 de enero sus funcionarios realizaran una inspección junto a técnicos de la Ceamse.

Esa visita se produjo luego de que el servicio de recolección de residuospermaneciera suspendido durante varios días a causa de las protestas laborales desatadas por la intempestiva decisión de la comuna de ponerle fin al contrato con la empresa Tecsan, a cargo de la operación del predio.

En aquél momento el conflicto fue superado tras la intervención de algunos funcionarios provinciales, por expresa instrucción de la gobernadora María Eugenia Vidal, quien se encontraba en Mar del Plata siendo testigo de cómo las calles de la ciudad permanecían colmada de basura.

El documento al que tuvo acceso LA CAPITAL revela que al visitar el predio los especialistas se encontraron con los mismos inconvenientes que habían sido detectado meses atrás, con el agravante de que el gobierno local aún no había hecho nada para resolverlos.

Por ese motivo, en el texto se alude a la decisión del gobierno de la Provincia de Buenos Aires de tomar intervención directa en el tema, para confiarle la gestión de la situación de crisis al OPDS y a la Ceamse, relegando a la comuna a un papel secundario.

Para justificar esa decisión, en el documento se advierte que la legislación prevé que cuando los municipios no cumplen en tiempo y forma con la presentación de un programa para la gestión integral de los residuos, como el que la Provincia venía reclamando insistentemente a la gestión de Arroyo, esa función podrá quedar a cargo de la autoridad ambiental.

“Dado que el 25 de septiembre de 2017 se le ha solicitado al municipio que informe sobre dicho plan” y que esa misma “solicitud fue reiterada el 14 de diciembre de 2107 sin haber obtenido respuesta” el Poder Ejecutivo Provincial “ha dado intervención directa al OPDS y a la Ceamse para que emitan recomendación de los pasos a implementar para revertir la situación actual”, se explica en el texto.

En los últimos meses reapareció el fuego en el predio de disposición final de residuos. Foto: Pablo Funes (@dronmardelplata)

El documento contiene un conjunto de propuestas orientadas a “restablecer las condiciones sanitarias del predio” y es muy crítico frente a los desmanejos cometidos durante todos estos meses por la gestión del intendente Arroyo.

Hacia el final se recomienda que, frente a los pésimos resultados exhibidos por el municipio, buena parte de las tareas por hacer sean materializadas a través de la administración de la Ceamse y con el control y la fiscalización del OPDS.

Entre otras cosas, el informe subraya la necesidad de intervenir para sofocar focos de incendio, generar nuevas instalaciones para el acopio y el tratamiento delíquidos lixiviados y construir nuevas áreas donde poder seguir disponiendo los residuos sólidos.

Además, advierte sobre la necesidad de ordenar “caótica” la tarea de los recuperadores, crear nuevas áreas de descarga y limpiar y acondicionar la calle de acceso al predio.

En el informe queda claro que si el municipio hubiera cumplido en tiempo y forma con todos esos trabajos, previstos desde el momento en el que el predio fue inaugurado, la situación actual sería muy diferente.

Especialistas volvieron a reprochar la “caótica” situación que se vive en el predio en relación a los recuperadores.

Uno de los párrafos más elocuentes del documento es el que describe los errores cometidos en el relleno sanitario, que terminaron acortando la vida útil del predio.

El OPDS recordó que el establecimiento pudo ser inaugurado en 2013 luego de numerosos intentos fallidos de licitar su construcción, permitiendo que por primera vez en décadas en Partido de General Pueyrredon contara con un predio que presentaba “una vida útil remanente original de 20 años“.

“Pero desde el año pasado dicha vida útil se ha visto afectada por la no continuidad de la ejecución de la infraestructura requerida para dar continuidad a la operación prevista del mismo”, se indicó en el documento.

Allí se explica que “el sistema de relleno sanitario por terrazas requiere que la continuidad de la infraestructura acompañe la secuencia de operación, de manera que las terrazas puedan ir montándose unas sobre otras. Cuando esta situación no es respetada, obliga a cambiar la secuencia de llenado, lo que impacta en los accesos y en la compactación (…). Por otro lado dicha infraestructura debe ejecutarse con una anticipación tal que permita su materialización en forma previa a la necesidad operativa del rellenado”.

Según el informe “esto no ha sido respetado por el municipio y hoy se cuenta con una vida útil remanente del predio de dos meses, según su condición de operación”.