El objetivo era desalentar el uso de autos en el pulmón verde mendocino. Desde el Gobierno afirman que se trató de un problema de inversión.
Según Arancibia, la principal causa del retraso radica en la inversión que tiene que realizar la firma que se quedó con la adjudicación del proyecto. "Cuando la empresa encargada de la iniciativa, analizó la situación y se dio cuenta de que no se trataba de invertir en 10 o 12 bicicletas, se retrasó todo un poco", afirmó el funcionario.
No obstante, el titular de Parques y Zoológicos, se mostró optimista de cara al futuro. "El proyecto se va a implementar y esperemos que, además del Parque, llegue a otros lugares", opinó. En este sentido, desde el pulmón verde mendocino esperan ansiosos la entrada en vigencia de la iniciativa, ya que permitiría disminuir la cantidad de automóviles que día tras día transitan por el lugar.
Por otra parte, cuando el plan fue anunciado en mayo, la idea era brindarle a los turistas una herramienta más para que puedan conocer Mendoza. Incluso, el secretario de Ambiente, Marcos Zandomeni, explicó meses atrás: "El proyecto será mayormente aprovechado por turistas que no tienen un medio para manejarse dentro del predio de forma más rápida y cómoda. Pero, con el tiempo, la idea es que haya cada vez menos autos porque hoy congestionan mucho".
Los mendocinos que cada fin de semana llegan hasta el pulmón verde, era otro de los segmentos apuntados por el relegado proyecto. De hecho, uno de los aspectos sólidos del plan consiste en brindarle un ambiente más seguro a los deportistas y familias que disfrutan del Parque, aunque, por ahora, deberán seguir esperando.
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