Quilmes: Se hizo pasar por damnificada, pero era una candidata de Mayra Mendoza acusada de estafas

Se trata de Patricia Iribarne, tercera candidata a concejal por la lista que encabeza la camporista Mayra Mendoza. Primero registró una estafa de casi 150 mil pesos en cheques truchos y finalmente tomó la sede de Desarrollo Social del municipio. Caos y repudio general.

En horas de la mañana de ayer, el canal ultrakirchnerista C5N tomó un primer plano de una supuesta “vecina de Quilmes”, que acongojada describía las penurias de la inundación en la zona oeste del municipio, luego de las fuertes tormentas de los últimos días. Lo que el noticiero se negó a contar es que se trataba de Patricia Iribarne, la escondida tercera candidata a concejal de Mayra Mendoza.

Iribarne había tomado por la fuerza, horas atrás, el edificio de Desarrollo Social de Quilmes junto a un grupo de militantes del Movimiento Evita. En efecto, se trata de una puntera política del ex intendente Francisco “Barba” Gutiérrez, en cuyo mandato llegó a ocupar la dirección de Economía Popular.

Durante varias horas, las autoridades municipales se reunieron con Iribarne para pedirle que desista de la toma advirtiéndole que, por tratarse de un edificio público, configura un delito. No sólo que se negó a retirarse sino que, además, testigos aseguraron que destruyó documentos oficiales. De este modo, tanto Iribarne como Mabel Montenegro, también candidata a concejal de Mayra Mendoza y puntera política presente en la toma, habrían sido denunciadas penalmente.

Paradójicamente, Iribarne no registra empleo de ningún tipo. Sólo presentó un monotributo por locación de servicio y forma parte de dos asociaciones, una llamada “Feliz Atardecer” y una cooperativa de trabajo denominada “Julio Roque Limitada”. A través de dichas instituciones, Iribarne entregó tres cheques sin fondo. Uno por 50 mil pesos, otro por 56 mil y un tercero por 40 mil, conformando una estafa de 146 mil pesos. Además, se encuentra en la mira de ARBA al ser considerada como “contribuyente con deuda de categoría 3”, a un paso de las instancias judiciales

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