Barba crecida, bermudas, zapatillas. Florencio Randazzo, en el domingo más frenético desde aquel junio de 2015 en que fue raleado de la marquesina electoral, salió a las apuradas de su casa en Gonnet rumbo a la estación de trenes de City Bell.

Supo, por un mensaje de Whatsapp, que un convoy del tren eléctrico estaba en camino. En la jerga se llama "marcha blanca" al viaje de prueba antes de que comience a llevar pasajeros.

Randazzo se enteró y fue. "Esta obra es tuya Flaco", lo palmearon unos ferroviarios. Vecino de la zona, se movió cómodo, cobijado por otro factor: tiene empatía con los gremios del sector. En rigor, Sergio Sasia, jefe de la Unión Ferroviaria, es un enfático promotor de la aventura Randazzo 2017, tal como ayer contó Clarín.

El domingo, el teléfono del ex ministro ardió desde temprano. El dato sobre la voluntad de ser candidato a senador y, llegado el caso, desafiar a Cristina de Kirchner en las PASO lo devolvió a horas agitadas como hacía meses no tenía.

"Se enteró que venía el tren y se fue solo a verlo. La obra empezó con él siendo ministro", le dijeron ayer a Clarín allegados a Randazzo con la intención de desvincular los episodios: la costura de su candidatura y su paseo, silvestre y casual, por los andenes. Al rato, por Twitter circularon instantáneas de celular. Causas y azares.

Hubo, además de fotos, palabras. Facundo Moyano, socio y puntal de Sergio Massa, salió a cruzarlo por "estar guardado y aparecer en una elección legislativa sin decir cuáles son las propuestas".

Late, en ese ring, una doble tensión: Randazzo apuesta a sumar actores del Frente Renovador (FR) y junta en paralelos avales en el mundo gremial. Estuvo, como contó Clarín en su momento, con Felipe Solá y con Héctor Daer, dos hombres del FR que reman por un esquema panperonista. Si incluye a Massa, mejor.

"Massa es el principal perdedor si aparece Randazzo porque atrae a peronistas que no van a un armado donde Cristina sea la candidata". teorizó un operador del PJ.

Fue, entre otros, uno de los ítem que compartieron el miércoles Emilio Pérsico, Juan Manuel Abal Medina, Leo Grosso y, el anfitrión, Fernando "Chino" Navarro en una cena con Gabriel Katopodis, Juan Zabaleta y Martín Insaurralde del grupo Esmeralda.

En la marcha de mañana, el Esmeralda y el Evita movilizarán en conjunto luego de charlas y reuniones con la CGT. Randazzo tiene su oficina cerca: ¿asomará su metro noventa por ahí?

En la cena, sobre la hipótesis -o la convicción- de que la candidatura de Randazzo depende de que se surja un bloque que lo respalde, el Evita y el Esmeralda hablaron de coincidir con gremios y definir un menú de prioridades: la unidad "racional" del peronismo, la crítica a Mauricio Macri y la defensa de las primarias.

"Para ganarle al macrismo tenemos que conectar con los problemas de la gente y apostar a unas PASO que nos permitan ampliar y elegir a los buenos candidatos" le dijo Katopodis a Clarín, uno de los intendentes que empuja hace meses la postulación de Randazzo.

Desde el planeta K hubo ácido. Andrés "Cuervo" Larroque atribuyó el efecto Randazzo a una maniobra de sectores de poder para "construir escenario" contra la centralidad de Cristina. Se cuidó, así y todo, de pegarle al ex ministro.

Francisco "Paco" Durañona, alcalde K de Areco, fue más duro. "En momentos de persecución judicial las operaciones mediáticas para posicionamientos personales están fuera de lugar".

Es una punta para explorar la grieta conceptual del peronismo: el kirchnerismo fija como urgencia la situación judicial de Cristina y familia, mientras otros enfocan la agenda de la conflictividad social.

"Los K querían hacer una movilización a Comodoro Py el mismo día que estaba convocada una marcha de la CGT para defender el trabajo y la industria nacional", planteó, con malicia, un territorial.

Así y todo, desde el Evita, Abal Medina agitó un fantasma que ronda en torno a la demora de Randazzo en oficializar una candidatura. La novela turbia de carpetazos.

"Si después de 8 años de gestión y con 15 meses de un nuevo gobierno aparece una denuncia cuando suena su candidatura seria algo demasiado clara y burdamente electoral", dijo el senador que aparece, junto a Navarro, como la oferta del Evita para habitar la lista de diputados nacionales.

José Luis Gioja, jefe del Consejo del PJ nacional, validó que Randazzo sea candidato. “Me parece muy bien que Randazzo tenga ganas de competir. Hay que buscar la unidad que no es uniformidad, si hay acuerdo perfecto, sino lo hay tenemos las PASO".

Otro que rozó el tema fue Aníbal Fernández, quien, además de confesar que "no tuvo vocación de ser candidato a gobernador", contó que él quería que Randazzo fuese el postulante en la Provincia en 2015.