El consumo de combustibles al público se incrementó en noviembre 3.67 por ciento respecto al mismo mes del año anterior, según informó la Secretaría de Energía de la Nación. Si bien la cifra no representa un repunte en términos absolutos, puede considerarse una buena noticia si se tiene en cuenta el contexto económico adverso que atraviesa nuestro país.

La suba fue traccionada por la mayor demanda de Gasoil Grado 2 en las Estaciones de Servicio, cuyas ventas treparon 10.8 por ciento, en tanto que también crecieron las de Diesel Grado 3 (3.52 por ciento) y Nafta Premium (5.18 por ciento).

El dato relevante es el descenso de los litros despachados de Nafta Súper (1.80 por ciento) por primera vez desde 2017, a causa de las restricciones al suministro aplicado por las compañías petroleras a este producto, debiendo los consumidores reemplazarlo por combustibles de mayor calidad, los cuales eran abastecidos sin mayores inconvenientes.

Al respecto, desde el sector de las Estaciones de Servicio manifestaron que esta situación, si bien permite un ligero alivio a las caídas que se observaron  durante  varios meses del corriente año, debe analizarse desde diversos enfoques. Sostuvieron que por un lado, al  comparar lo sucedido con 2018, con volúmenes de venta realmente bajos, resulta obvio que cualquier incremento volumétrico actual  reflejará un saldo positivo.  “Ello se  nota  con  mayor  intensidad en la  nafta  premium  que luego  de largos  meses  con  caídas  contantes,  aparece  con un aumento  interanual  importante,  muy por  encima de la  media”, explicaron.

En  el caso  de los  gasoil, se  observa  también un alza, debido fundamentalmente  que a partir  de  fines  de  agosto, habiéndose liberado  el precio  mayorista  de estos  productos  (para  el agro,  industria  y  transporte),  los consumos  a través  del pico surtidor  (precios  congelados)  escalaron hasta  que comenzaron  las  restricciones.

Sin embargo el escenario preocupa si se analiza con lo ocurrido en octubre, ya que las ventas se derrumbaron 5.3 por ciento. “El consumo real sigue deprimido más allá del congelamiento, que en síntesis y en principio solo amortiguó la caída”, opinaron.

Finalmente y en lo que respecta a las empresas, YPF lidera el mercado con un 56.84 de participación, seguida por Raízen con el 21.09 y AXION con el 10.39 por ciento. Durante este período, Puma Energy fue la compañía de mayor crecimiento, con una suba interanual del 30.9 en los volúmenes comercializados.