En su primer encuentro oficial tras el paro general del pasado 6 de abril, la conducción de la CGT se reunirá hoy con el propósito de dar un golpe de timón en su ofensiva crítica hacia del Gobierno, decisión que implicará en el corto plazo la suspensión de nuevas medidas de fuerza para adoptar una estrategia destinada a fortalecer el respaldo a sus reclamos en la opinión pública.

En esa apuesta, la entidad promoverá en las próximas semanas una serie de conferencias o jornadas públicas con destacados especialistas para reforzar los fundamentos de sus cuestionamientos a la política económica de la administración macrista.

El puntapié de esa estrategia se concretará la próxima semana con la realización de una jornada específica para analizar la situación de la pobreza, junto al titular del Observatorio de la Deuda Social Argentina de la UCA, Agustín Salvia.

"La intención es articular un espacio académico para discutir los temas que preocupan a los trabajadores y a la CGT y generar masa crítica en la sociedad para reforzar los reclamos que le planteamos al Gobierno durante el paro", explicó a este diario un referente de la cúpula cegetista.

La decisión de revisar la ofensiva de confrontación abierta con la gestión de Mauricio Macri fue consensuada por la denominada "mesa chica" de la central obrera la semana pasada durante un encuentro reservado para hacer un balance del resultado de la huelga general y convenir los próximos pasos de la central. En concreto, esa determinación supone dejar en suspenso la posibilidad de profundizar el plan de lucha con nuevos paros y movilizaciones en el corto plazo, lo cual será ratificado esta tarde en la reunión que el consejo directivo cegetista mantendrá desde las 14 en su sede de Azopardo 802.

En cambio, en la reunión, que será encabezada por el triunvirato que integran Héctor Daer, Juan Carlos Schmid y Carlos Acuña, se definirá la organización de un acto para el próximo 1´ de mayo, en consonancia con el Día del Trabajador. La intención de los jefes de la central es realizar un encuentro en un estadio cerrado (se evalúan los microestadios de Obras Sanitarias y Ferro) de manera de evitar repetir el bochornoso final de la movilización del pasado 7 de marzo en el centro porteño.

Otros de los ejes de la deliberación de hoy de la conducción de la CGT se concentrará en la definición de una respuesta al Gobierno, por las recomendaciones que emitió el mismo día del paro con el propósito de "transparentar" las elecciones y la vida interna de los gremios. Esos consejo, elaborados por el Ministerio de Trabajo de Jorge Triaca y publicados en el Boletín Oficial a través de una resolución, incluyeron la incorporación del voto electrónico, el cumplimiento de la ley de cupo femenino del 30% y el rechazo a que dirigentes que estén "inhibidos penal o civilmente" formen parte de las listas electorales de los gremios.

Desde la CGT ya anticiparon una respuesta específica a esas recomendaciones, aunque advirtieron que "el Estado debe respetar la autonomía legal de los sindicatos y no meterse en su vida interna", remarcó otro miembro de la cúpula de la entidad.