Las señales de que el Gobierno le declaró la guerra a los que marcharon con la CGT

Las señales de que el Gobierno le declaró la guerra a los que marcharon con la CGT

Por ahora son indicios, señales. Datos de la realidad que demuestran una conducta que con el tiempo, se estima florecerá, para evidenciar la receta del escarmiento. Ámbito.com recopiló los seis indicios que comprueban que el Gobierno le declaró la guerra a los sectores sindicales, políticos o sociales que participaron de la marcha de la CGT a Plaza de Mayo.

"Escuchar al otro, dialogar, entender, buscar soluciones en conjunto, eso va a acelerar el crecimiento. Poner la energía ahí, no poner la energía en movilizarnos a no sé qué, como hace unas horas veíamos acá. Eso es una pérdida de tiempo, eso no nos lleva a ningún lugar. Lo que lleva es dialogar, como lo hemos hecho con los sindicatos en este año y medio (...) Ya para confrontar hemos perdido. Desde que ustedes y yo no habíamos nacido en la Argentina se viene confrontando y echándole la culpa a alguien de lo que nos pasa a nosotros. Siempre nos han querido inventar que un sótano de Nueva York o de Hong Kong están pensando en cómo vamos a joder a la Argentina, y eso no es verdad".

La frase la pronunció Mauricio Macri ante jóvenes que accedieron a su primer empleo, minutos después de que la CGT convocara a miles de personas frente a la Casara Rosada. La mayoría de los gremios que participaron de la protesta la interpretan como una declaración de guerra. Y hay señales para confirmarlo.

1) Apenas dos horas después que Juan Carlos Schmid puso sobre la mesa los ítems de la agenda social que exige discutir la central obrera, Macri decidió despedir al viceministro de Trabajo Ezequiel Sabor y al controlador de la caja de las obras sociales, Luis Scervino, dos hombres con fuertes lazos y vínculos gremiales.

2) A primera hora del día siguiente, se canceló una reunión en el ámbito del Ministerio de Salud donde dos integrantes del Consejo Directivo de la CGT iban a debatir el destino de $ 8.000 millones para las obras sociales. A ese encuentro por la implementación de la demorada Cobertura Universal de Salud (CUS) habían sido convocados los cegetistas José Luis Lingeri y Carlos Frigerio. El eyectado Scervino tenía previsto conducir el frustrado cónclave. Desde ahora, los sindicalistas avecinan más dificultades para acceder a los reintegros por prestaciones.

3) Ámbito Financiero informó que 48 horas después de la marcha que el "Gabinete político de Macri" decidió reactivar las causas judiciales "adormecidas" en Comodoro Py contra Hugo y Pablo Moyano y congelar el proceso de reordenamiento de OCA, donde Camioneros posee 7.500 trabajadores directos y otros 5.000 tercerizados. Patricio Farcuh, dueño de la compañía postal, tiene pendiente el cobro $ 650 millones que le adeuda el Estado. Sin ese dinero, cientos de camioneros de Moyano podrían ser suspendidos o quedar en la calle.

4) El Gobierno nacional volvió a postergar una reunión para discutir la sanción de la ley de Emergencia Alimentaria prevista para el viernes con Barrios de Pie, la Corriente Clasista y Combativa (CCC) y la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP). Las tres organizaciones sociales participaron del acto de la CGT. Es más, los jefes de las tres agrupaciones (Daniel Menéndez, Juan Carlos Alderete y Esteban "Gringo" Castro, respectivamente) estuvieron en el escenario junto a los dirigentes sindicales.

En la reunión -que ya había sido suspendida tras la marcha por San Cayetano- se esperaba la presencia de los ministros de Desarrollo Social, Carolina Stanley, y de Trabajo, Jorge Triaca, y del secretario del coordinación interministerial, Mario Quintana. Dos fuentes oficiales informaron que se suspendió por "problemas de agenda de los ministros" y confirmaron que fue reprogramada para el viernes primero de septiembre a las 8.30.

"Los CEO's poco entienden de los problemas de la gente y tienen poca vocación de servidores públicos. Es una señal la suspensión de una reunión para avanzar con la plena implementación de la Emergencia Social y la sanción de la Emergencia Alimentaria, y que los argumentos para suspenderla de un día para el otro sean estos", se quejó Menéndez, y aseguró a este medio que la reunión fue suspendida porque Quintana se va de vacaciones.

5) El bloque de diputados nacionales de Cambiemos no apoyará que el proyecto de ley que habilita la expropiación de la planta de Pepsico en Vicente López. El rechazo no sorprende en ámbitos legislativos, pero desilusiona a los trabajadores y partidos de izquierda que se movilizaron a la Plaza. Fueron varios centenares los que marcharon desde la carpa montada frente al Congreso, bajo la consigna "basta de ajuste: paro nacional".

Una de las columnas más importante fue la del Frente de Izquierda de los Trabajadores, bloque parlamentario autor de la ley que declara de "utilidad pública" y "sujeto de expropiación" a "los inmuebles ubicados en Julio A. Roca 4735 de Florida y todas las instalaciones y muebles, incluidas las maquinarias, herramientas, stock e insumos para la producción que componen la planta fabril propiedad de la empresa Pepsico Argentina SRL y/o quien o quienes resulten ser sus legítimos propietarios".

6) Las CTA de Hugo Yasky y Pablo Micheli no informaron represalias directas en las últimas horas. "Este Gobierno nos niega la personería gremial aunque haya recomendaciones de la OIT para que nos las entregue. Es un castigo permanente que nos dejen afuera del diálogo, no nos reconocen como interlocutores de los trabajadores cuando se sientan a discutir con el movimiento obrero, solo convocan a la CGT", dijo el gremialista de ATE a ámbito.com. 

Micheli no pudo obviar los 13 despidos que se registraron en el Ministerio de Defensa de Oscar Aguad este miércoles. "No sé si tomarlo como represalia, lo tomaría como parte de la política de este Gobierno neoliberal. Seguro se vienen muchos más despidos después de octubre", estimó. Además, Micheli recordó que el Ministerio de Triaca apeló un fallo que otorgaba la personería a la Federación de Energía (FeTERA), enrolada en la CTA Autónoma. "Le pedí que no lo haga, pero estamos acostumbrados a esto", remarcó.

Los gremios de docentes porteños UTE y Ademys, incorporados a la CTERA de Yasky, batallan contra el 21,5% de aumento salarial que dispuso el gobierno del PRO en Capital Federal. Lo consideran insuficiente para cubrir la canasta básica y exigen una equiparación con el 27,4% que la misma gestión ortorgó en Provincia.

7) Un alto el fuego con los amigos. Desde la Casa Rosada diseminaron antes y después de la movilización la versión oficial -oficiosa- de que Macri había pedido a la CGT suspender la protesta a Plaza de Mayo si en las PASO Cambiemos era la alianza política más votada. Los voceros de semejante solicitud incluyeron una supuesta respuesta del triunvirato: "Si, prometo". 

Sin embargo, el ala más dura de la CGT interpretó que el congelamiento del escrutinio provisorio en la fugaz victoria de Esteban Bullrich no era mérito suficiente y decidieron avanzar con la organización de la marcha. En el medio se toparon con un grupo de caciques cetegistas que no estuvieron de acuerdo con la protesta y lo dejaron en claro el 22A: algunos solo se movilizaron con sus columnas y no subieron al palco; otros ni se acercaron al microcentro el día de la marcha; y los más afines al macrismo almorzaron con Triaca.

La lista de díscolos incluye a Héctor Daer (Sanidad), Gerardo Martínez (Uocra), Guillermo Pereyra(petroleros), Armando Cavalieri (Comercio), Ramón Ayala (peones rurales), Omar Maturano (La Fraternidad), Roberto Fernández (colectiveros), Sergio Sassia (ferroviarios), Omar Viviani (taxistas), Ricardo Pignanelli (mecánicos), Norberto Di Próspero (personal legislativo) y los metalúrgicos Antonio Caló Francisco "Barba" Gutiérrez. Cada uno optó por una gambeta distinta, según su conveniencia. Que estos sindicatos no reciban reprimendas o se beneficien con algunas políticas gubernamentales en lo inmediato será otro indicio de que el Gobierno le declaró la guerra a los sectores que marcharon a Plaza de Mayo.

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