"Sería una mala salida cubrir el bache fiscal con suba de impuestos"

El ministro de Hacienda de Vidal anticipó que convocará a los gremios estatales a rediscutir paritarias: "No queremos que el salario se perjudique", afirma Hernán Lacunza.

 

Hernán Lacunza es el ministro clave de María Eugenia Vidal. La gobernadora le reconoce seriedad en el manejo de las cuentas públicas, un rigor que le generó no pocas tensiones con los intendentes peronistas y sectores del poder real.

 

Hoy, cuando todavía se sienten las réplicas de la corrida, Lacunza enfrenta un desafío inmenso: Cuando la Argentina habla de ajuste, el Conurbano tiembla. Es el filtro real de eso que se enuncia como "viabilidad política" de las correcciones macroeconómicas.

 

Con un agravante: En medio de los esfuerzos de más de medio mandato para acotar el enorme déficit heredado, la Nación ahora analiza trasladar a la provincia los servicios públicos y hasta el transporte. Lacunza responde con una reflexión: "Cuando recibimos la provincia hicimos un diagnóstico de la inversión que hacía falta para recuperar a niveles normales toda su infraestructura: puentes, obras hídricas, rutas, escuelas, hospitales. Son 30 mil millones de dólares. Al final de nuestro mandato habremos invertido 7.500 millones de dólares". La conclusión es clara: Más que nuevas cargas, la provincia que concentra el 40 por ciento de la población del país, necesitaría un Plan Marshall.

 

¿Cómo ve la situación económica del país?

 

Está atravesando una situación más delicada que hace unos meses. El programa económico tuvo un accidente en Mayo con la corrida cambiaria, que tiene efectos colaterales sobre la producción y el bienestar: Trae algunos puntos más de inflación y algunos menos de crecimiento.

 

Lo que destaco es que a diferencia de otras crisis, esta vez la economía estaba mejor preparada. Dejo para los analistas definir cuanto tiene esta crisis de impacto internacional y cuanto local, pero lo que destaco es que no nos saco de pista y nos volcó como pasó en crisis anteriores.

 

Esto que vivimos le pasa a cualquier país del mundo cuando tiene viento de frente externo o algún perfecto mecánico y tiene que ir un par de meses al taller o la banquina a reparar los daños.

 

Roque Fernández dijo que una corrida de estas características demanda tres meses antes de normalizarse la situación ¿Usted que piensa?

 

Creo que hay distintas experiencias y duraciones, pero la reacción de la autoridad monetaria ha sido lo normal en estas situaciones, donde ahorristas e inversores quieren pasarse de pesos a dólares. La autoridad monetaria ofrece ahora Letes como opción para los que quieren pasarse a dólares y retira pesos del mercado para que no haya un efecto expansivo mayor.

 

Las corridas son fenómenos de duración acotada y creo que ya terminó. Ahora estamos abocados a contener los efectos colaterales sobre la inflación y el consumo.

 

¿Cómo impacta esta crisis en la provincia? Se me ocurren dos efectos posibles, sobre la recaudación por la caída de actividad y sobre el peso de los servicios de deuda en dólares por la devaluación...

 

La provincia tiene un balance que se refleja en el presupuesto, que para este año prevé un déficit de 30 mil millones y nada de eso va a cambiar. En obra pública tenemos previsto invertir 7 puntos del gasto -en 2015 eran 3 puntos- y eso que es una prioridad, no se va a ver afectado porque tenemos los fondos.

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Es verdad que un punto menos de crecimiento afecta la recaudación, pero se compensa por la inflación.

 

Usted dice que la crisis esta vez los agarró mejor parados que en el pasado, en donde se puede observar esto...

 

En 2012 hubo un parate de la actividad, fue un año recesivo. En ese año el aguinaldo se pagó en cuatro cuotas y ahora se adelantó y se va a pagar el de diciembre. En 2012 hubo que salir a buscar fondos a cualquier tasa y ahora no hizo falta. En aquel momento la obra pública bajó a la mitad, pasó de 6 a 3 puntos del producto, hoy está en 7 y no va a bajar. Y además en aquel momento hubo un impuestazo y se subieron los ingresos brutos. Ahora bajaron y no van a subir.

Vamos a convocar a los gremios a revisar las paritarias, ante esta nueva realidad no queremos que los salarios del sector público se vean perjudicados.

¿Qué pasa con las paritarias, tienen dando vuelta sin cerrar el tema docente y un compromiso de reabrirlas si se dispara la inflación con los estatales y otros gremios?

 

Nosotros negociamos paritarias con 36 actividades y llegamos a un acuerdo con 32. Obviamente la más resonante es con los docentes porque ocupan casi la mitad del personal de la provincia.

 

Todas las cerradas tienen cláusula de revisión prevista para el último trimestre del año y es verdad que se han anticipado los tiempos porque la inflación va a ser superior a lo previsto. No vamos a ser necios ni intransigentes y vamos a convocar a los gremios que ya hemos hecho un acuerdo, porque ante esta nueva realidad no queremos que los salarios del sector público se vean perjudicados. Los vamos a convocar en las próximas semanas.

 

¿También convocarán a los docentes?

 

Con los sindicatos docentes es un diálogo más difícil. Cuando la gobernadora anunció que los íbamos a volver a convocar, ante el anuncio declararon un paro para esta semana, otro para antes de las vacaciones y otra para después. Ante esa tensión el diálogo es más difícil.

 

Baradel puso un piso de 25% de aumento como para empezar a negociar.

 

No me parece adecuado negociar números por los medios. Pero me interesa destacar un punto: Cuando una empresa o sector discute paritarias con el gremio, está discutiendo con los recursos de esa empresa o industria en el marco de la puja distributiva entre empresas y trabajadores. Acá es distinto, el que discute es el Estado y lo hace con los recursos de los contribuyentes. Para pagar aumentar los salarios de médicos, docentes, estatales y policías se hace con dinero de los contribuyentes y si no alcanza o se suben los impuestos -que no queremos- o se hace con deuda, que son impuestos futuros.

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Hace poco estuvo con la gobernadora con el ministro Dujovne para analizar el traspaso de Edesur, Edenor, Aysa ¿En qué punto está esa negociación?

 

Sí estuvimos en reuniones con el ministro de Hacienda, con Jefatura de Gabinete, bajo el compromiso de que Argentina atraviesa una situación de stress y eso exige mostrar un camino solvente desde el punto fiscal.

 

Edenor, Edesur, Aysa, son temas de agenda, pero no son los únicos. Lo que hay detrás es el reparto de los recursos federales. No quisiera perder de vista que desde todos los niveles del Estados hay que hacer un esfuerzo en acomodar nuestras cuentas para que el sector privado no tenga impuestos tan altos. Sería una mala salida de esta coyuntura si se busca cubrir el bache fiscal con más impuestos.

Si quieren hablar de los subsidios a la energía en el área metropolitana, no hay problema. pero hablemos de todo el reparto de los fondos federales: La provincia de cada dos pesos que aporta recibe uno.

 

Y en esa conversación sobre el reparto de los fondos federales un rubro es el de los subsidios a la energía, que es cierto que en ese rubro el área metropolitana recibe más que el resto del país. Pero el reparto de fondos federales tiene más de 30 líneas. Además de esos fondos la provincia aporta el 37% y recibe el 21%, es decir que de casi cada dos pesos que aporta recibe uno.

 

Si vamos a hablar de los subsidios, de acuerdo, pero hablemos de todo: Si no estamos mirando el postre que recibimos, sin ver que reciben otros de plato principal y entrada.

Se habla mucho de Aysa y las eléctricas, pero algunos afirman que es mayor el costo de transferir el transporte y el gas.

 

En el caso del gas no, porque no hay subsidios al consumo. En el caso del transporte urbano, sí es así, pero es parte de ese mecanismo perverso del gobierno anterior, que no van a los pobres en general y que es cierto que están localizados en el área metropolitana como una compensación por aquel reparto injusto de los recursos. Por eso decimos, discutamos todo el reparto, no sólo la línea que le convenga a algunos.

 

¿El marco para dar esa discusión es el Presupuesto nacional del año que viene?

 

Sí, ese es el instrumento político y legal para dar esta discusión.

 

¿No temen quedar atrapados en una situación donde el Gobierno necesita el acuerdo con el peronismo para sacar ese presupuesto con el ajuste y entonces la provincia sea el pato de la boda de esa negociación?

 

No, porque el Gobierno federal es consciente de esta asimetría. Pero sí es cierto que la provincia está subrepresentada en el Congreso nacional. Pero creo que llegó la hora de dejar de ver como hacemos para que se quede sin postre el vecino. Esa actitud egoísta o distrital nos ha llevado a este subdesarrollo de la Argentina.

 

Yo preguntaría si alguna provincia cree que se puede desarrollarse en un país que tiene el Conurbano que tenemos, que recibe migración constante del resto de las provincias. Hay que pensar con una cabeza de equilibrio nacional, no de espacio local. No hay desarrollo posible sin un país más equilibrado. Si no que hacemos: ¿Dejamos sin agua potable y cloacas al territorio donde vive el 40 por ciento de los pobres de la Argentina, o el 48 por ciento de los jóvenes pobres del país?

¿No les queda un gusto amargo luego de todo el esfuerzo que hicieron para acercarse al equilibrio fiscal, con la pelea por recuperar el Fondo del Conurbano y demás y cuando empezaban a acercarse les cae la devaluación, más la posibilidad de una transferencia de nuevos servicios?

 

Si, entiendo, es como que nos corren el arco. Pero si sirve para poner de relieve en el debate público estas inequidades en materia de distribución de fondos federales y su correlato en materia de desarrollo productivo y social en el Conurbano, habrá valido la pena este trauma económico transitorio.

 

Por otro lado, la recuperación del Fondo del Conurbano no queda anulado. Ese dinero ya no es para este gobierno sino para todos los bonaerenses, que recuperó un derecho que se lo habían erosionado durante los doce años anteriores.

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¿El presupuesto de la provincia del año que viene incluirá un ajuste?

 

Recién estamos empezando a elaborarlo, pero la premisa es seguir juntando recursos para hacer obras, que creemos es lo que cambia la vida de los bonaerenses.

 

Cuando empezamos en el Gobierno se invertían 5.000 millones de pesos de fondos provinciales en obras, ahora invertimos 40.000 millones, aunque se corrija el número por inflación es casi el triple y eso no va a cambiar el año que viene.

 

El intendente Martín Insaurralde propuso estatizar Edesur porque considera que el servicio sigue siendo muy malo a pesar de los fuertes aumentos de tarifa ¿Cuál es la posición de ustedes respecto a esta idea?

 

Lo escuché, pero me parece prematuro abrir esa discusión. Habrá que analizarlo llegado el caso, hoy es una compañía con regulación nacional a través del Enre, no es un tema que dependa de la provincia. 

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