El Sindicato de Custodios denuncia la falta de un protocolo de seguridad por el coronavirus

El Sindicato de Custodios denuncia la falta de un protocolo de seguridad por el coronavirus

El secretario nacional de Prensa del Sindicato Unido Trabajadores Custodio Argentino (SUTCA), Daniel Jacobsen, dialogó con RADIO REALPOLITIK FM (www.realpolitik.fm) y denunció, en el marco de la pandemia, la ausencia de medidas preventivas para el sector.

Luego de la agresión que sufrió el guardia de un edificio en Vicente López, cuyo video se viralizó en medios y redes sociales, se despertó la duda sobre los cuidados hacia quienes se encargan de garantizar la seguridad. En este sentido, Daniel Jacobsen, de SUTCA, aseguró que “no sólo no hay ningún protocolo de seguridad sino que se niegan a repartir alcohol en gel y menos a desinfectar los puestos de trabajo”.

También señaló que el barbijo es una excentricidad para los dueños de las empresas de seguridad: “Ahora estamos luchando para que a aquellos compañeros que tengan que estar con sus hijos, porque no están yendo a la escuela, les puedan dar la licencia que se decretó”.

Por otra parte, el gremialista recordó que alrededor del 90 o 95 por ciento de los trabajadores que hacen seguridad en los boliches están en negro y, en esas condiciones, no tienen derecho alguno. “No sólo no tienen licencia por el coronavirus, sino que tampoco tienen vacaciones pagas, aguinaldo, están totalmente sin ningún tipo de protección”, aseveró. Además agregó que también se da la pelea por aquellos que están en blanco, cuando el empresario se niega a dar licencias a un trabajador que tenga algún síntoma o enfermedad preexistente.

“Somos contundentes y exigimos que las cámaras empresarias y las empresas tomen cartas en el asunto, pero no lo hacen”, destacó.

LA GRIETA

Daniel Jacobsen también afirmó que con el último gobierno se ha producido la verdadera grieta: “Hay un sector de la sociedad que se cree con derecho a todo, que termina odiando al Papa, a las madres de plaza de Mayo, hasta a Diego Maradona; los han enseñado a odiar a tipos que reciben una asistencia social, una AUH y ese odio se trascribe en estas cosas que están pasando”.

“El último sector social que nos ha gobernado ha instalado y ganado parte de una batalla cultural donde el otro, el diferente, es el enemigo”, sentenció. 

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